Bajo costo de mantenimiento de un vehículo eléctrico

Bajo costo de mantenimiento de un vehículo eléctrico

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“El bajo costo de mantenimiento de un vehículo eléctrico es verdaderamente impresionante”

Angel Coyago, Gerente de Postventa en BYD Ecuador, nos comparte en esta ocasión su experiencia de más de 4 años en el mantenimiento de flotas de vehículos y buses eléctricos en el país.

El Gerente de Postventa de BYD está a cargo de los buses, taxis, vans y un camión eléctrico que la marca opera en Ecuador. Su experiencia nos permite conocer sobre los principales componentes que se desgastan en un vehículo eléctrico y cómo mejorar su rendimiento.

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A mayor simpleza, menor mantenimiento

A priori, y siguiendo la lógica ingenieril, un coche eléctrico debe tener sí o sí un menor mantenimiento que uno de combustión. Como sabéis, los motores de combustión son relojes de cuco compuestos por miles de piezas moviéndose de forma sincronizada. Una obra de arte de ingeniería compuesta por infinidad de piezas que deben soportar cambios extremos de temperatura e importantes niveles de fricción de forma habitual.

Para evitar el envejecimiento prematuro de un motor de combustión es primordial que cuidemos las condiciones en las que trabaja. Hay que hacerles mantenimientos periódicos. Es por eso que es necesario cambiar el aceite cada ciertos kilómetros o periodos de tiempo (depende de la marca y el tipo de motor), así como los filtros del propio aceite, del combustible y del aire de admisión. El objetivo es que estos fluidos no pierdan sus propiedades y el motor (así como todas sus piezas) pueda seguir trabajando en las mejores condiciones posibles y siempre dentro de sus parámetros de diseño.

Aún realizando todos los mantenimientos a rajatabla, es inevitable que, tarde o temprano, algunas piezas se acaben desgastando y haya que cambiarlas. Son piezas que tienen una durabilidad limitada y que hay que sustituir una o varias veces a lo largo de la vida útil del coche. Hablamos de elementos como la correa de distribución, el embrague o las bujías, entre otros. Y es entonces cuando a los usuarios nos toca visitar el taller y pasar por caja.