Este martes se han difundido imágenes grabadas por las cámaras de seguridad de un centro de salud mental en Kalamazoo (Míchigan, EE.UU.), del momento en que hasta siete personas adultas inmovilizaron a un adolescente afroamericano, lo que posteriormente provocó su muerte.

Los hechos ocurrieron el 29 de abril, pero el material ha sido publicado ahora por el abogado de la familia afectada. Aquel día, Cornelius Fredericks, de 16 años, empezó a tirar su almuerzo a una persona que se encontraba en otra mesa. Se le retiró la bandeja de comida, pero el adolescente siguió lanzando su alimento pese a la presencia de los empleados de esa entidad.

Debido a esa situación, los trabajadores lo arrojaron al piso y fue inmovilizado durante varios minutos hasta que quedó inconsciente. Fredericks fue hospitalizado, dos días después falleció de un paro cardíaco, informa la prensa local.

Dos de los empleados involucrados fueron despedidos y acusados de homicidio involuntario y abuso infantil, mientras que una enfermera que estaba parada cerca observando la escena también fue acusada de homicidio involuntario por negligencia grave e incumplimiento de su deber.