Universidad de Cuenca recibe nuevos autos eléctricos

Universidad de Cuenca recibe nuevos autos eléctricos

Universidad de Cuenca recibe nuevos autos eléctricos. Las unidades se suman a un parque automotor eléctrico con el que se realizarán pruebas en operación real. La Universidad de Cuenca se posiciona de esta manera como una entidad vanguardista en la investigación sobre la electromovilidad. La adquisición fue posible gracias a un acuerdo de canje de deuda con el gobierno español. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en los grupos de WhatsApp. Si usas Telegram  ingresa al siguiente enlace.

En el Julio que acaba de concluir, la Universidad de Cuenca celebró la entrega de dos furgonetas eléctricas. La recepción de estos modelos corresponde a la siguiente fase del proyecto denominado “Mover U”.

“En el laboratorio Micro Red de la universidad experimentamos con una serie de dispositivos basados en energías renovables. Contamos con paneles solares, aerogeneradores, etc. —comenta Pablo Delgado Aguirre, quien se desempeña como instrumentista del laboratorio—, pero en lo que respecta a medios de transporte tenemos vehículos de diferentes segmentos: 3 automóviles Kia Soul, 6 bicicletas, y 2 motonetas, todos 100% eléctricos, a los cuales ahora tenemos la satisfacción de sumar estas dos vans de la marca BYD.”

La incorporación de estas unidades tiene un doble propósito.

De un lado, se utilizarán para actividades regulares ensajería, operaciones dentro del campus, transporte de empleados). Pero, “luego los vehículos se traen al laboratorio para medir cual ha sido su comportamiento en las condiciones reales y particulares de la ciudad de Cuenca” —señala Delgado.

En tal contexto, las nuevas furgonetas se insertan perfectamente en el Proyecto “Mover U”, pero Delgado aclara que servirán para llevarlo todavía más lejos.

“La meta es que hasta el 2025, la flota de vehículos de la institución sea enteramente eléctrica. Incluso se piensa adquirir un bus de estas características.

Sin embargo, como paulatinamente crece el interés de la ciudadanía por cambiarse a la electromovilidad, una de las furgonetas será readaptada como electrolinera móvil. Ya sea que le instalemos una carga lenta o rápida, servirá para brindar en Cuenca servicio y auxilio a quien lo requiera.” —avizora Delgado.

No obstante, uno de los aspectos a resaltar del proceso, es que la adquisición de las furgonetas se hizo mediante el canje de deuda entre el gobierno ecuatoriano y el de España.

El Ab. Alan Caiza Niama, Director de Gestión de Institutos y Conservatorios Superiores de la SENECYT, explica el funcionamiento de este mecanismo. “Desde hace algunos años el Estado ecuatoriano buscó formas creativas de respaldar financieramente la repotenciación de nuestras universidades e institutos superiores. La alternativa de que recursos adeudados al gobierno español sean, con su venia, utilizados para proyectos de inversión ha sido una iniciativa importante. En tiempos recientes esto ha permitido al Estado canalizar dineros en el orden de los 2’700.000 USD y 750.000 USD, a centros de estudio públicos en Chimborazo y Azuay, que de otra manera se hubiesen perdido —explicó el funcionario.

Los recursos del canje por deuda son administrados por una unidad descentralizada, adscrita a la SENECYT, mas deben cumplir algunas solemnidades previas.

Delgado manifiesta que, “En nuestro caso, las características de los vehículos que necesitábamos fueron trasladadas a las entidades correspondientes, y fue el gobierno español el que, recurriendo a sus contratistas, declaró de entre varias propuestas recibidas, como ganadora a la compañía BYD.”

Se trata de vehículos muy buenos, con capacidad para 5 pasajeros, caracterizados por un motor de 100 kW, una autonomía nominal de 300 km, y capaces de cargarse en 6 horas, en un tomacorriente de 220 voltios.

“Acorde al fabricante su vida útil supera a la de los vehículos a gasolina, por lo que ofrecen 8 años de garantía. Son prestaciones formidables que será un deleite poner a prueba in situ” —concluye Delgado.

De su lado, Caiza señala que, “aunque no se puede entregar el beneficio del canje de deuda a todos los institutos y universidades, nos congratula saber el buen uso que la Universidad de Cuenca está dándoles para la protección del ambiente a través de la reforma tecnológica. Esperamos que, en el mediano plazo, más entidades se sumen al trabajo investigativo en torno al desarrollo de la movilidad sustentable.” Universidad de Cuenca recibe nuevos autos eléctricos