Más tiempo que todos los gobiernos juntos

Elizabeth Cabezas, presidenta de la Asamblea Nacional; Rina Campain, del movimiento CREO; Kharla Chávez, de Alianza PAIS, y Mario Molina, secretario de Defensa Jurídica de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), coincidieron en que debe producirse una renovación en los cuadros de los dirigentes de las centrales obreras de Ecuador.

“La renovación debería ser en todos los ámbitos, así como hemos exigido en los estamentos políticos. Me parece importante dar un giro y un paso en el tema de los sindicalistas. ¡Qué suerte para algunos que estén tanto tiempo, más de todos los gobiernos juntos!”, destacó Cabezas.

Para Campain, asambleísta por el movimiento CREO, sí es necesaria la oxigenación en todo tipo de representantes, aunque dice que son los mismos trabajadores quienes les ponen en los cargos.

Para la legisladora por el movimiento Alianza PAIS y vicepresidenta de la Comisión de Fiscalización, Kharla Chávez, el relevo dirigencial siempre será saludable. “Son buenos los nuevos rostros, los nuevos liderazgos con ideas frescas, con ganas y voluntad de trabajar, con ideas positivas.

Debe haber voluntad para hacer los cambios que necesita la gente, y que requieren los sindicatos. Si eso es positivo, yo lo apoyo”, indicó.

Según Mario Molina, secretario de Defensa Jurídica de la CUT, esta organización sindical nació como una respuesta frente a la inconformidad con respecto a los “eternos” dirigentes de las organizaciones agrupadas en el Frente Unitario de Trabajadores (FUT).

Indicó que la CUT cuenta con 700 mil afiliados a escala nacional, entre ellos: empleados públicos, comerciantes, amas de casa, campesinos, etc.

Con respecto a lo que sucede en la Cedocut, CEOSL, CTE y UGTE, dijo que en la CUT llevan adelante un modelo de autogestión, que los dirigentes no tienen salario y se los elige cada 4 años con el voto universal de sus integrantes.

Molina, quien es empleado de la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT), dijo que la CUT se formó en 2015 y que son “un ejemplo, la primera central que tiene vida jurídica, estatutos”.

Frente a las acusaciones de ser aliados primero del gobierno de Rafael Correa y luego del actual, Molina lo rechaza de manera tajante. “No somos serviles, pues nosotros hemos hecho respetar nuestros derechos. Somos la nueva esperanza para los obreros”.

Al igual que los asambleístas consultados, consideró que en el movimiento obrero del país existe un anhelo de gente nueva. Por eso, critica que dirigentes de las otras centrales estén en sus cargos por años. “Veinte años en el puesto es poco. Algunos tienen en la dirigencia sindical la edad que tiene el Código del Trabajo”, ejemplificó.

Finalmente, los legisladores coincidieron en resaltar que la alternancia, en todos los campos, es buena para la democracia, y que para ello es saludable el voto universal de sus integrantes. (I)