La competitividad es la base para la generación de empleo adecuado, una de las principales preocupaciones tanto de los ciudadanos como del Gobierno. Por ello es uno de los ejes de “El Acuerdo es ahora”, que lidera el vicepresidente de la República, Otto Sonnenholzner.

Este se enmarca en la Competitividad, Empleo e Innovación, aspectos básicos para mejorar la productividad. “La competitividad es la capacidad que podemos tener los ecuatorianos frente a frente con cualquier país del mundo y decirle ¡Yo también puedo!, afirmó el Segundo Mandatario en la inauguración del proyecto.

Ante esa afirmación destacó la inclusión que existe desde el Gobierno para socializar temas en beneficio del país, sin que existan cálculos políticos. “Por eso nos sentamos aquí gente de diferentes lugares, pensamiento e ideología política y visiones, porque el objetivo de todos es el mismo: la prosperidad en equidad y justicia”.

La propuesta fue recibida por emprendedores, empresarios, funcionarios de Gobierno y sociedad civil, representada por los dirigentes de la central de trabajadores más numerosa del país.

El objetivo central del Gobierno es “que el sector productivo sea el principal dinamizador de la economía nacional a través del emprendimiento y la generación de empleo en un clima de fortalecimiento del ecosistema de innovación”, según afirmó el viceministro de Producción, quien también acudió al evento y detalló que “no vamos a descansar hasta lograr la dinamizaciónlaboral”.

La competitividad es un concepto transversal que abarca muchos aspectos. El Foro Económico Mundial (FEM) publica anualmente un índice que contempla diferentes parámetros.

Ecuador tiene mucho por mejorar sobre este tema, según analiza la catedrática de la Escuela de Negocios Espae, Sandra Wong, quien también es directora ejecutiva del Centro de Estudios Asia Pacífico. Explica que el país obtuvo 55,8 (sobre 100) en el Índice de Competitividad Global (ICG) del Foro Económico Mundial, que lo ubica en el puesto 86 entre 140 economías.

En su análisis prioriza dos aspectos relacionados con los pilares contemplados para obtener la puntuación, recalca que las calificaciones que tiene Ecuador en el Reporte de Competitividad Global del FEM no son favorables; sin embargo, no se discuten. El primer aspecto es sobre el Dinamismo en los negocios, cuyo puntaje fue de 45,2.

La experta detalla que se puede dividir lo que hace falta para mejorar en dos secciones. Lo primero es en la parte interna: las empresas.

En el país existen iniciativas importantes, como: fondos semilla; “pero el punto aquí no es el tema financiero. Hay que pensar en el largo plazo. Las escuelas de negocios deben impulsar un cambio de mentalidad en los gerentes y empresarios”. Recomienda que “el Gobierno pueda apoyar con incentivos, programas de educación y legislación adecuada”.

A esto se suman los aspectos externos de la empresa: costo de iniciar un negocio y el tiempo para concretarlo. La tasa de recuperación por insolvencia y, el marco regulatorio de insolvencia, entre otros temas.

Otro aspecto es la prevalencia de barreras no arancelarias, que se traduce en el fomento a la eficiencia en regulaciones que son estrictamente necesarias. A ello se suman: Mercado de trabajo, Adopción de tecnología, y, Educación y habilidades. (I)