El director de la agencia de inteligencia israelí, el Mossad, concluyó una ronda de reuniones diplomáticas en Estados Unidos. David Barnea mantuvo encuentros con altos funcionarios estadounidenses, afirma el comunicado publicado por la Oficina del Primer Ministro de Israel.

Barnea «presentó material de inteligencia sensible» a los funcionarios, y también advirtió que Israel «no podrá quedarse de brazos cruzados» mientras se concluye el acuerdo nuclear entre EE.UU. e Irán, al que los israelíes se oponen.

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A su vez, los funcionarios estadounidenses aseguraron al jefe del Mossad que «Estados Unidos sigue comprometido con la seguridad del Estado de Israel». También afirmaron que Estados Unidos no permitirá que Irán obtenga un arma nuclear y que Washington seguirá cooperando con Israel en cuestiones regionales.

Aunque el consejero de Seguridad Nacional norteamericano, Jake Sullivan, quien negoció con Barnea, confirmó la reunión, se negó a dar detalles, afirmando que ambos habían discutido «una serie de temas globales y regionales», informa Times of Israel citando al portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de EE.UU. También declaró que la reunión estaba programada de antemano.

El primer ministro de Israel, Yair Lapid, declaró a principios de septiembre que continuaría presionado a Estados Unidos para que no vuelva al acuerdo nuclear iraní. También mencionó que el objetivo del viaje de Barnea fue «explicarle al Gobierno estadounidense» la posición del país hebreo «con respecto a los peligros inherentes» al pacto con Irán.