Autoridades de Tungurahua ratifican trabajo a favor de la naturaleza

Manuel Caizabanda y Javier Altamirano, flamante prefecto de Tungurahua y alcalde de Ambato, respectivamente, fueron posesionados el martes 14 el mayo en sus cargos en medio de rituales ancestrales.

Durante los actos, ambos ratificaron su compromiso con la protección del Medio Ambiente y obras fundamentales para el desarrollo de los tungurahuenses.

Altamirano y los trece concejales que conforman el nuevo Concejo Cantonal de Ambato fueron presentados públicamente en el auditorio del edificio municipal del Sur.

“Priorizaremos las necesidades de localidades periféricas de Ambato, tomando en cuenta la voz de sus representantes y sus propios proyectos. Los esfuerzos del Cabildo se enfocarán en proteger nuestros afluentes, bosques, reservas de recurso hídrico, y zonas de protección”, señaló Altamirano.

Una de las principales obras ambientales que en Ambato deberá darse continuidad, es la construcción de la planta de tratamiento de aguas residuales.

El proyecto se levanta en el sector Las Viñitas, al norte de la urbe, empezó a construirse en julio de 2016, tiene un costo aproximado de $ 26,1 millones, y presenta un avance del 96%.

En la explanada del edificio municipal Sur (parte externa del auditorio), el representante de los pueblos indígenas de Tungurahua Eustaquio Toala entregó al alcalde el bastón andino de mando, símbolo de autoridad y respeto en los pueblos Pilahuín, Chibuleo, Salasaca y Tomabela, los cuatro pueblos autóctonos de la provincia.

Juramento de Caizabanda

Algo similar se evidenció en el auditorio del Gobierno Provincial de Tungurahua, ubicado en el centro de Ambato, donde se oficializó la posesión del prefecto Manuel Caizabanda, quien fue alcalde del cantón Pelileo por tres periodos y pertenece a la etnia Salasaca.

Alrededor de mil personas estuvieron presentes durante la toma de juramento y compromiso de la autoridad, así como de Saida Haig, la viceprefecta.

“Si bien la administración saliente, la cual estuvo 19 años, deja un fundamento innegable y sólido en cuanto a preservación ambiental, debemos continuar y reforzar los trabajos por cuidar nuestros páramos y las cuencas hídricas”, expresó.

Desde 2008, el Fondo de Páramos protege más de 32 mil hectáreas de fuentes hídricas en los 9 cantones. Entre los años 2000 y 2018, la inversión de la entidad en riego y manejo de aguas asciende a $ 45,9 millones. (I)