Xi Jinping y su homólogo filipino Rodrigo Duterte llaman a actuar con moderación para mantener la paz en el mar de la China Meridional

El presidente de China, Xi Jinping, y su homólogo filipino, Rodrigo Duterte, llamaron este viernes a actuar con moderación para mantener la paz en el mar de la China Meridional, durante una cumbre telefónica de una hora.

«Los líderes enfatizaron la necesidad de realizar todos los esfuerzos para mantener la paz, la seguridad y la estabilidad en el mar de la China Meridional, ejerciendo moderación, disipando las tensiones y trabajando en un marco de mutuo acuerdo para una cooperación funcional», comunicó la oficina presidencial de Filipinas, citada por Reuters, y agregó que ambas partes se comprometieron a ampliar el espacio para compromisos positivos, incluso si existieran disputas.

Por su parte, el mandatario chino expresó que el manejo adecuado de las controversias territoriales por las dos partes ha proporcionado una base importante para la cooperación amistosa entre China y Filipinas, al tiempo que ha salvaguardado de manera efectiva la paz y la estabilidad en la región.

En esa línea, subrayó que Pekín mantiene una continuidad y estabilidad en su política hacia Manila y está dispuesto a trabajar con el país insular para promover el desarrollo sostenido y sólido de las relaciones bilaterales y alcanzar nuevos niveles.

Durante su cumbre virtual, los dos líderes también hablaron de la necesidad de una resolución pacífica del conflicto en Ucrania y sobre la pandemia del covid-19, y se comprometieron a colaborar para abordar los problemas del cambio climático.

Zona en disputa

El mar de la China Meridional ha sido una fuente constante de tensión durante años al ser objeto de reclamos territoriales y marítimos de múltiples actores: China, Vietnam, Filipinas, Malasia, Indonesia y Brunéi. La región, rica en recursos, es también una importante vía internacional por la que transitan billones de dólares en tráfico marítimo cada año.

Desde que asumió la presidencia en 2016, el mandatario filipino ha buscado lazos más cálidos con el gigante asiático, dejando en general de lado una disputa territorial de larga duración sobre el mar de la China Meridional a cambio de ayuda económica y compromisos de inversión.

Sin embargo, en marzo, Manila presentó una protesta diplomática por una embarcación de la Guardia Costera china que realizó «maniobras a corta distancia» de lo que considera sus aguas territoriales, lo que aumentó el riesgo de colisión en una zona que ambos países reclaman como propia.