Una joven estadounidense devuelve a un museo de Roma una piedra que había robado
El Museo Nacional Romano ha recibido desde el extranjero un paquete voluminoso y pesado con un contenido inesperado: un fragmento de mármol milenario con la inscripción «A Sam, Te quiero Jess, Roma 2017», empacado con cuidado. En la caja también encontraron una carta de una joven que expresó su arrepentimiento por haber robado la piedra y pidió perdón «por ser una estadounidense tan gilipollas».
«Me siento terrible, no solo por haber robado esta pieza de su lugar legítimo, sino también por ponerle una inscripción», escribió la mujer en la carta. «Estuvo extremadamente mal por mi parte y solo ahora, como adulta, me doy cuenta de lo desconsiderado y despreciable que fue», agregó, confesando que pasó horas tratando de limpiar la piedra y quitar lo que había escrito encima, pero sin éxito.
El director del museo, Stéphane Verger, explicó a Il Messaggero que el paquete llegó desde la ciudad de Atlanta y sostuvo que lo envió una joven que debió de visitar Roma como turista en 2017 y aparentemente tomó el fragmento de mármol para dárselo a su novio.
Si bien no se sabe si ha sido el 2020 interrumpido por la pandemia del covid-19 lo que ha hecho reflexionar a Jess, provocando sus remordimientos, o si le ha pasado lo mismo que a la canadiense Nicole, que devolvió fragmentos robados de Pompeya hace 15 años, afirmando que estaban «malditos» y le trajeron mala suerte, problemas familiares y una enfermedad, Verger de todas formas calificó como «un gesto simbólico muy importante» el hecho de que la estadounidense haya devuelto la piedra tres años después del robo.
El director del Museo Nacional Romano detalló que la pieza devuelta por Jess es mármol originario de Anatolia (Asia Menor) que se utilizaba mucho en el Imperio romano. «Probablemente fue robado de un parque arqueológico, tal vez el Foro Romano», sostuvo.