Una delegación de 18 organizaciones brasileñas alerta en EE.UU. sobre las amenazas de Bolsonaro a las próximas elecciones
Una delegación brasileña conformada por 18 organizaciones viajó a EE.UU. para alertar sobre las amenazas que ha hecho el presidente Jair Bolsonaro al venidero proceso electoral de octubre en el gigante suramericano, que algunos sectores han catalogado como un «intento de golpe de Estado».
La delegación está desde el pasado domingo y tiene previsto permanecer en el país norteamericano hasta el próximo viernes.
Este martes fueron recibidos en la sede del Departamento de Estado en Washington. «El grupo informó sobre los continuos ataques a la democracia en Brasil e instó a EE.UU. a reconocer de inmediato el resultado de las elecciones presidenciales de octubre, tan pronto como el Tribunal Electoral publique el recuento de votos, independientemente de quién gane las elecciones«, informó el Instituto Vladimir Herzog, que forma parte de la delegación.
De acuerdo con el instituto, el objetivo es «evitar que se materialicen las amenazas» que ha hecho Bolsonaro contra el sistema electoral y contra la democracia brasileña.
La delegación también fue recibida por el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes; y tiene previstas reuniones con los senadores Bernie Sanders y Bob Menéndez, y los representantes Mark Takano y Jamie Raskin, este último forma parte de la comisión especial que investiga el asalto al Capitolio ocurrido el 6 de enero de 2021, en medio de la negativa de Donald Trump de reconocer su derrota en los comicios presidenciales.
Previamente, la delegación se reunió con organizaciones de la sociedad civil estadounidense y con organismos internacionales con sede en Washington.
«La atención internacional es fundamental en este momento. Queremos informar a las autoridades extranjeras sobre la realidad del proceso electoral desde el punto de vista de la sociedad civil, para que no queden a merced de lo que digan solo las autoridades del Poder Ejecutivo», dijo Paulo Abrão, director ejecutivo de Washington Brazil Office (WBO), la organización que se encarga de la agenda de la delegación en la capital estadounidense.
Entre las personas que forman parte de la delegación hay representantes de agrupaciones afrobrasileñas, LGBTIQ+, ambientalistas, defensores de derechos humanos, entre otros, que denuncian el aumento de la persecución dirigida a estos sectores y el crecimiento de la violencia política en Brasil.
«Es importante que estos representantes de la sociedad civil brasileña sean escuchados de primera mano, personalmente, sin intermediarios, porque son, al fin y al cabo, los protagonistas de muchas de las violaciones de derechos humanos vividas en Brasil recientemente, y son ellos los que traen esta preocupación sobre la importancia de respetar el resultado de las elecciones de 2022″, dijo James Green, también miembro de WBO, previo al viaje.
El ataque de Bolsonaro
Bolsonaro ha atacado pública y sistemáticamente a las instituciones de Brasil; una arremetida que se ha incrementado a medida que se acercan los comicios, previstos para el 2 de octubre.
La semana pasada recibió en su residencia oficial a embajadores y otros diplomáticos de cerca de 40 países, y, ante ellos, cuestionó el sistema de voto electrónico de Brasil, puesto en marcha desde 1996.
También criticó duramente al Tribunal Superior Electoral (TSE) y acusó a sus miembros de conspirar para favorecer a su contrincante; específicamente al exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva, quien lleva la delantera en las encuestas sobre las elecciones presidenciales.
Desde el Partido de los Trabajadores (PT), que postula a Lula, han denunciado que Bolsonaro estaría fraguando un «intento de golpe de Estado» para desconocer los resultados si le son adversos.
«Me parece que el riesgo mayor es que ocurra algo en el período post electoral, después que Lula haya vencido», alertó el diputado federal Paulo Texeira, secretario general del PT.
