Tras quejas por semanas laborales de 100 horas, Goldman Sachs permitirá que sus empleados descansen los sábados

El director ejecutivo del grupo de banca de inversión Goldman Sachs David Solomon informó el pasado domingo que fortalecerá la aplicación de la llamada «regla del sábado», una norma no oficial de la compañía que tiene como objetivo impedir que los empleados trabajen demasiadas horas extras y que dispongan de al menos un día libre a la semana, informa el New York Post.

Esta declaración se produce unos días después de que comenzaran a circular por las redes sociales los resultados de una encuesta hecha por 13 analistas de primer año descontentos con sus condiciones laborales en Goldman Sachs. Según el sondeo, estos empleados trabajan un promedio de 100 horas semanales y duermen unas 5 horas cada noche, por lo que su salud física y mental se ha visto gravemente afectada.

Dear god. Analyst satisfaction survey from the Investment Banking division of @GoldmanSachs. pic.twitter.com/RgWMIzieIH

— David Adler (@davidrkadler) March 18, 2021

La pandemia de covid-19 no ha hecho más que agravar la situación. El personal se queja de una «supervisión excesiva» y aseguran que es poco probable que permanezcan en la compañía durante los próximos seis meses si las condiciones laborales siguen siendo las mismas.

«Hubo un momento en el que no comía, no me duchaba ni hacía nada más que trabajar desde la mañana hasta pasada la medianoche», señala uno de los banqueros en la encuesta.

En una entrevista con The Guardian, otro empleado declaró bajo condición de anonimato que los trabajadores de primer año ganan aproximadamente 12 dólares por hora antes de impuestos, menos que el salario mínimo de 14 dólares para Londres.

«Si no recibes tu bono, se te pagará menos por hora que a un empleado de McDonald’s. Y todo el mundo lo sabe, pero eso también aumenta la presión, en el sentido de que la gente tiene miedo de expresar sus preocupaciones», confesó.

Anteriormente, la portavoz de Goldman Sachs, Nicole Sharpe, señaló en un comunicado que la compañía reconoce que los trabajadores «están muy ocupados», porque el negocio es sólido y los volúmenes están en niveles históricos.

«Un año después de empezada la pandemia de covid, la gente está comprensiblemente bastante agotada, y es por eso que escuchamos sus preocupaciones y tomamos varias medidas para abordarlas», manifestó Sharpe.