Varios países miembros de la OTAN ubicados cerca de la frontera con Rusia pidieron a EE.UU. que acelere el proceso de suministro de armas para ellos ante una presunta amenaza por parte de Moscú, señaló este sábado The Washington Post.

De esta manera, Kusti Salm, secretario general del Ministerio de Defensa estonio, declaró en una entrevista que su país necesita sistemas de lanzacohetes múltiple HIMARS, drones Reaper y radares contra baterías. «Esto es lo que más necesitamos inminentemente en cuanto a poder militar letal para disuadir a Rusia», indicó.

Polonia espera recibir sistemas de misiles Patriot, HIMARS, cazas F-16 y tanques Abrams, mientras que sus funcionarios quieren que Washington acelere la entrega de armas que había prometido a Varsovia. Al mismo tiempo, The Washington Post reportó, citando a fuentes anónimas, que el jefe de la Oficina de Seguridad Nacional de Polonia, Pawel Soloch, habló recientemente con el asesor de Seguridad Nacional de EE.UU., Jake Sullivan. Según la información, Soloch destacó la necesidad de producción en el ámbito de la defensa para responder mejor a amenazas que surjan.

EE.UU. pretende entregar sistemas de defensa aérea NASAMS a Ucrania en los próximos meses

A su vez, el agregado de Defensa polaco, Krzysztof Nolbert, declaró: «sé que [los suministradores en Washington] están trabajando a máxima velocidad», y agregó que, no obstante, se trata de «una situación de emergencia», por lo que el país necesita armas «ahora».

Asimismo, el periódico recordó que el ministro de Defensa letón, Artis Pabriks, afirmó previamente este mes que es esencial armarse y armar a Ucrania por el riesgo a que el conflicto armado «llegue a nuestras fronteras». Pabriks señaló que su país espera obtener artillería de cohetes de largo alcance y sistemas de defensa aérea y costera, que —detalla The Washington Post— «generalmente [están] fuera del alcance de países con presupuestos modestos».

Los países de la región piden también un aumento del número de militares desplegados en Europa. Según el medio, aproximadamente 100.000 tropas estadounidenses se encuentran desplegadas en Europa, pero «no es suficiente» para los países cercanos a Rusia.