«Seré todo lo que odies»: La impactante campaña que analizará en España cómo se comporta el odio en las redes sociales
La lucha contra los delitos de odio, últimamente extendidos en las redes sociales amparados en cierto anonimato, es el objetivo de la campaña lanzada por Accem, una organización no gubernamental española que trabaja para mejorar las condiciones de vida de las personas en situación de vulnerabilidad.
Con el nombre de ‘Ódiame’ y la cara visible del actor español Jorge Suquet, la campaña pretende poner el foco en cómo afecta el odio vertido en las redes sociales a cada una de las personas a las que va dirigido, casi siempre pertenecientes a colectivos en riesgo de exclusión social, como las personas migrantes o las pertenecientes al ámbito LGTBI+.
Se trata de una acción de carácter experimental que no solo busca la denuncia, sino también la observación y posterior análisis de un fenómeno cada vez más frecuente tanto en la vida analógica como a través de las plataformas digitales.
Esta acción se va a llevar a cabo en diferentes etapas a lo largo de todo este año y sus resultados se utilizarán para la planificación y desarrollo de proyectos futuros de Accem.
Estoy aquí para hacerte ver que sólo odias a quien es distinto a ti.Para que entiendas que, cuando vuelcas odio en las redes o contribuyes a esparcirlo, estás machacando la vida a personas reales.#Ódiame en Twitter, en Facebook, en Instagram.https://t.co/mhF59GgQ5jpic.twitter.com/5KBRsrGszp
— HombreBlancoOccidental (@HombreBlancoOc1) May 21, 2021
Lo que ya se ha visto es el spot inicial, en el que Jorge Suquet se presenta como un hombre blanco occidental al que nadie mira «mal por la calle», al que nadie «odia» y al que nadie «insulta en redes».
«Cuando seas machista me convertiré en mujer, cuando seas homófobo me convertiré en lesbiana, cambiaré mi género cuando seas tránsfobo. Seré un inmigrante, seré chino, musulmán, refugiado. Seré todo lo que odies», dice Suquet en su impactante video, adelantando la siguiente fase de la campaña, que transformará al actor físicamente gracias al trabajo de un equipo de efectos especiales y maquillaje.
Así, si se detecta que durante un periodo el odio en las redes se vierten fundamentalmente comentarios machistas o sexistas, Suquet se transformará en mujer, y así sucesivamente con el resto de colectivos que suelen recibir este tipo de comentarios ofensivos.
«Yo estoy aquí para demostrarte lo absurdo que es tu odio, para que te des cuenta de que solo odias a quien es distinto a ti«, continúa Suquet en su alocución. «Estoy aquí para que entiendas que cuando esparces tu odio en las redes, o contribuyes a difundirlo, no estás perjudicando a un colectivo, estás machacando y jodiéndole la vida a gente real, gente con problemas, gente en situaciones difíciles, a veces menores. Estoy aquí para que me odies a mí y no a ellos«, dice el actor para poner el acento en cómo los mensajes publicados en redes no son inocuos y afectan a personas reales.
Como parte de la campaña, se difundirán una serie de grabaciones en las que se dará voz a personas que han sido víctimas de delitos de odio y que cuentan en primera persona su experiencia, como es el caso de los migrantes subsaharianos que deben recorrer un peligroso trayecto hasta alcanzar España, donde han vivido situaciones violentas, humillantes o discriminatorias solo por su color de piel o su procedencia.
Los delitos de odio en España
Según el Ministerio del Interior, desde 2013 hasta 2019 los delitos de odio cometidos en España han aumentado un 45 %, aunque solo dos de cada 10 son denunciados.
Los últimos datos disponibles indican que en 2019 se produjeron 1.598 delitos de odio y 122 infracciones administrativas, lo que supone un aumento del 6,8 % con respecto al ejercicio anterior. El 34 % tienen que ver con la ideología, seguido del racismo y xenofobia (30,2 %) y de la orientación sexual y la identidad de género (16,3 %). El resto de delitos tienen que ver con discriminación por sexo o género, las creencias y prácticas religiosas, las personas con discapacidad, el antigitanismo, la aporofobia (odio al pobre), la discriminación generacional o por enfermedad o el antisemitismo.
La mayoría de los delitos consistieron en amenazas (20,5 %), lesiones (18,8 %) y daños (10,3 %), aunque también se produjo discriminación, injurias, trato degradante, actos racistas y xenófobos en el ámbito deportivo y coacciones.
Perfil de la víctima y el victimario
La mayoría de las víctimas de estos delitos son hombres (1.081), que casi doblan a las mujeres (597), salvo en el caso de los delitos antisemitas, de discriminación por sexo y generacional, donde la mayoría de las víctimas son mujeres.
La distribución de las víctimas según su nacionalidad sitúa en primer lugar a las de nacionalidad española con el 72,3 % del total, siendo la cifra de víctimas extranjeras un 27,7 %. Entre estas, las que contabilizan valores más elevados son las procedentes de Marruecos (7,8 %). Sin embargo, el porcentaje de españoles se reduce hasta el 57 % en la franja de edad de los 26 a los 40 años.
En el caso de los autores de los delitos, cinco de cada seis personas detenidas o investigadas son hombres (490 frente a 100) y más de la mitad tienen entre 18 y 40 años y una amplia mayoría (84,7 %) son españoles.
Los delitos de odio cometidos a través de las redes sociales registrados en 2019 fueron 204, con un incremento del 22,9 % con respecto a 2018.