El Ministerio de Defensa de Rusia aseguró que miembros de los servicios especiales de Ucrania detonaron una bomba de nitrato de amonio en una granja situada cerca de la localidad de Mazanovkа, en la República de Donetsk.

«Como resultado de la explosión, se formó una nube de gas venenoso de aproximadamente un kilómetro de altura, que se desplazó hacia la localidad de Kramatorsk», informó a la prensa el ministerio.

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Las autoridades rusas aseguran que este hecho hostil es una «nueva provocación» perpetrada por uniformados ucranianos con el objetivo de acusar a sus Fuerzas Armadas del «presunto uso de sustancias venenosas» prohibidas.

Desde el ministerio recordaron que el pasado 11 de mayo militares ucranianos volaron una cisterna llena de salitre cerca de la localidad de Dólguenkoye, en la provincia de Járkov, para acusar a Rusia del uso de armas químicas. Asimismo, recalcaron que Moscú ha advertido en «repetidas ocasiones» sobre tales provocaciones por parte de Kiev.