Qué es un Aval

Es conocido como un aval el contrato de la fianza para el derecho cambiario. Este surgió en Londres para los usos de ellos con respecto a la letra de cambio, el cual es un compromiso de carácter unilateral para el pago. El cual suele ser de manera general bastante solidario y se encuentra a favor de un tercero que igualmente recibirá la prestación.

Así el avalado no cumpla con su parte, por esto el que es garante de dicho aval es llamado avalista. Se aplica de esta misma forma para el aval las reglas que aplican legalmente a la fianza, de no ser de esta manera la aplicación supletoria. No suele caber cual al avalista se le obliga a cancelar sin ninguna reserva para poder oponerse.

En cambio el aval bancario es uno de los casos particulares en el cual el aval por cualquier razón. Para este caso es una cooperativa de crédito, el banco, una caja de ahorros o cualquier otra de las entidades del crédito.

Por lo tanto el avalista será por este motivo la garantía de las obligaciones que son ajenas.

También se compromete a ser el garante de una obligación que es ajena, por esto es que se encarga de cubrir el paso del crédito o de intereses. Esto se cumple en cualquier caso de que la persona deudora no cumpliese con la totalidad de la deuda respectiva.

Para qué sirve un Aval

Es de utilidad en los contratos de tipo mutuo con la respectiva garantía de la hipoteca, aun cuando la garantía sea el inmueble. También es posible que se decida documentar el pago con los títulos de crédito, de este modo es frecuente que los bancos soliciten.

Cuáles son los requisitos para ser un Aval

Para que pueda ser un avalista y por esto mismo ofrecer su respectivo aval en cualquiera de las operación de crédito o un préstamo. Para esto es necesario que cuente con la solvencia más adecuada, por ello la entidad financiara solicitara que se cumplan algunos requisitos.

La mayoría de las condiciones solicitadas son del tipo genérico, esto para todo el tipo de los avalistas.

Aunque dependerá del tipo de la operación que se avale, la entidad financiera puede ser un poco más exigente con sus respectivos criterios

El actuar como un avalista podrá suponerle además de esto una serie de obligaciones o de las limitaciones que son importantes.

Para conocer antes de poder avalar cualquier tipo de las operaciones. Principalmente será necesario que cumpla con:

Solvencia económica

Para comenzar, la persona que desee avalar cualquier operación del crédito tiene que contar con una buena solvencia económica,

Esta tiene que ser al menos tan buena como la del futuro deudor. Además saber que asume de manera inmediata la deuda si hay falta de pago.

Solvencia de todo el patrimonio

Además de que posea una total solvencia económica, o las entidades financieras que se encargan de buscar que todos los avalistas posean también patrimonio.

En especial cualquier propiedad inmobiliaria, que no tengan el cargo hipotecario.

Debido a que este se encarga de ofrecer una mayor calidad de garantía para la caja de ahorros o el banco.

Un buen Historial de crédito

Uno de los principales aspectos que más valora la entidad financiera es que cuente con un historial de crédito totalmente impecable.

Este historial de crédito se encarga de verificarlo su respectiva entidad bancaria, con el respectivo informe que emiten las centrales de riesgo del país.

Es el motivo por medio en el cual es de importancia que sea totalmente sincero, con la entidad debido a que estos igualmente conocerán la verdad.

Los Ingresos monetarios deben ser estables

Este es el último de los requisitos que están encargados de establecer los bancos y sus cajas de ahorro.

Esto para actuar como un avalista para poder contar con algunos ingresos realmente estables.

Qué debo saber antes de decidir ser Aval

Para poder ser avalista es necesario que conozca todas las consecuencias en las cuales supone con la persona a la que avala. Esto sin importar si es solo en el momento de la firma o para largo plazo.

Como le hemos repetido en diversos momentos, el avalista tiene que garantizar el pago de la deuda en el caso de que el deudor no lo cancele. Esta garantía podría afectar a todo el patrimonio en el futuro y el presente.

Una vez conociendo esta información solo tiene que evaluar si realmente desea asumir esta responsabilidad.

Porque además en caso de que usted fallezca esta deuda al ser usted aval también la heredara su sucesor.

Por ello además tiene que colocar la atención para los siguientes puntos:

Considere  quien es la persona que se encuentre solicitando, si se trata de algún amigo o de un familiar, si resulta ser alguien cercano si es confiable.

O si es responsable, si cumple aquello que cumple lo que está prometiendo, si es formal con alguna de las deudas que estén pendientes.

SI tiene un adecuado historial de crédito o no.

Cuál es el tipo de relación que posee con la persona, si desconoces mucho de esta persona no deberías ni considerarlo.

Aun si esta persona aparento ser responsable ya que podrías acabar en algunos problemas.

Una vez que estés totalmente convencido de dar como respuesta del sí, en el caso de involucrarte en la totalidad de la deuda.

Debes considerar que en aquel caso de que sea necesario tiene que cancelar la deuda.

Pues la responsabilidad es también tuya con todas las implicaciones.

Y por último tener la respectiva solvencia económica que se encuentra demandando la deuda para poder realizar el respaldo.