Reporte: EE.UU. se resiste a demandas ucranianas de lanzacohetes de largo alcance por temor a una escalada con Rusia y provoca «frustración» en Kiev
Ucrania se siente cada vez más frustrada por el hecho de que la Casa Blanca se niegue a proporcionarle sistemas de cohetes de largo alcance fabricados en EE.UU., un arma que, según Kiev, es fundamental para dominar los duelos de artillería pesada en la región del Donbass, según informa Politico citando varias fuentes.
Funcionarios del Gobierno ucraniano han pedido a Washington durante meses que le suministre Sistemas de Cohetes de Lanzamiento Múltiple (MLRS, por sus siglas en inglés). Sin embargo, la Administración Biden se ha contenido por temor a que estas armas puedan ser utilizadas para lanzar ataques contra el territorio de Rusia, ampliando y prolongando así el conflicto, aseguraron tres personas familiarizadas con el asunto.
«Hubo un impulso en Ramstein, pero parece que se ha enfriado», afirmó un funcionario del Congreso con conocimiento de las conversaciones realizadas el mes pasado en la base aérea estadounidense de Ramstein, situada en Alemania, donde 40 naciones se reunieron para discutir los próximos pasos en la entrega de armamento a Ucrania. En Kiev «se está acumulando una frustración» por las nuevas restricciones a la ayuda militar, agregó la fuente.
A pesar de que los MLRS encabezan la lista de peticiones de Ucrania, Biden ha decidido que ahora es más importante suministrar obuses, debido a que son más baratos y su munición es más fácil de conseguir.
«Tenemos que tomar decisiones sobre qué sistemas de armas proporcionan el mayor beneficio para el dólar» con el dinero que el Congreso asigna al esfuerzo de Kiev, indicó un funcionario de la Administración Biden. En las últimas semanas, cuando se empezó a reducir el último paquete de financiación, Washington decidió que «era más eficaz y eficiente enviar 90 [obuses] M777, porque se pueden enviar más» por el mismo precio, que entregar un número mucho menor de MLRS.
Al mismo tiempo, según el medio, EE.UU. ha proporcionado «discretamente» a Ucrania varios sistemas de cohetes de lanzamiento múltiple soviéticos retirados de los arsenales de sus aliados de Europa del Este. Sin embargo, siguen desconfiando del suministro de sistemas estadounidenses de mayor alcance por el riesgo de escalada con Rusia.