Realizar Presupuesto es bueno para tus Finanzas
Realizar Presupuesto es bueno para tus Finanzas derriba estos cinco mitos, Hacer un presupuesto suele tener mala fama. Analiza estos cinco mitos y te darás cuenta que es una herramienta muy útil para el manejo de tu dinero.
Realizar Presupuesto es bueno para tus Finanzas
- Se necesita más dinero. Se piensa que no se puede hacer un presupuesto mientras no se gane más dinero porque el actual no alcanza. Esto es falso, ya que el presupuesto sirve justamente para organizar los ingresos de manera que se cubran gastos, deudas y ahorro.
- Se limita la diversión. Se considera que tener un presupuesto lleva a una vida aburrida y austera. No es cierto, pues el presupuesto ayuda a planificar, precisamente, los gastos no básicos como comidas fuera de casa, ropa, salidas, etc.
- Es la suma de los gastos. Sumar el estado de cuenta de la tarjeta de crédito más las transferencias bancarias, no es tener un presupuesto sino hacer seguimiento. El dinero se gasta por muchas vías y presupuestar se trata de ser proactivo y planificar antes en qué se va a gastar para tener control y asegurarse de que alcance.
- Hay que hacerlo una sola vez. Algunas personas hacen un presupuesto en enero y esperan que funcione todos los meses, pero no existen dos meses iguales. Aunque hay gastos fijos, hay otros variables como vacaciones, cumpleaños, citas médicas, matrícula escolar y del auto, etc. Estos gastos son los que pueden causar problemas financieros si no están presupuestados, por lo que se recomienda hacerlo cada mes.
- No se puede con ingresos irregulares. Muchas personas no hacen un presupuesto porque trabajan en ventas, por cuenta propia, comisionan, etc. Con mayor razón, la organización es fundamental para manejar el dinero “incierto”. Se puede hacer un presupuesto basado en la cantidad que está garantizado que se recibirá o en los ingresos del mes pasado.
Utiliza esta herramienta que te permitirá hacer fácilmente un presupuesto y distribuir tu dinero según la recomendación de los expertos: 50% gastos básicos, 40% gastos no básicos y deudas, 10% ahorro.