Aunque en la actualidad las farmacéuticas que han desarrollado vacunas contra el covid-19 solo negocian con Estados —debido a la escasez del medicamento—, algunos países de América Latina ya ajustan sus normativas para permitir la adquisición de los fármacos por parte del sector privado.

El pasado viernes, el Congreso peruano aprobó un texto sustitutorio de una ley anterior, que autoriza a las empresas privadas y a los gobiernos regionales y locales del país suramericano para adquirir vacunas contra el coronavirus.

La normativa fue aprobada con 97 votos a favor, 5 en contra y una abstención. En ella se establece que el Poder Ejecutivo, previa autorización de la Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (Digemid), autoriza al sector privado en un plazo no mayor de siete días calendario de presentado el expediente, la importación o adquisición de la vacuna contra el coronavirus.

Añade que las dosis «deberán ponerlas a disposición del Centro Nacional de Abastecimiento de Recursos Estratégicos (Cenares), para su distribución gratuita en todo el territorio nacional».

Sin embargo, también establece que los privados «tendrán la prioridad de inmunizar a su personal dentro del marco del Plan Nacional de Vacunación contra la covid-19, establecido por el Ministerio de Salud».

Colombia

También la semana pasada, el Gobierno colombiano, mediante la Resolución 507 del Ministerio de Salud y Protección Social, aprobó la importación, adquisición y aplicación de vacunas contra el covid-19 por parte de privados.

El texto se establecen las directrices para llevar a cabo la adquisición de las vacunas, como solicitar la modificación de la Autorización Sanitaria de Uso de Emergencia (ASUE) ante el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima) para ser incluidos como importadores, diferentes al titular de la Autorización.

También, deben asumir los costos de la adquisición de los biológicos y su importación, adjudicarse directamente las condiciones negociadas para la compra y solamente se podrán negociar vacunas que tengan autorización sanitaria de uso de emergencia, otorgada por el Invima.

En cuanto a la aplicación, los privados deberán hacerla en instituciones de servicios de salud habilitadas para la vacunación.

Asimismo, pueden aplicar las vacunas a personas con un vínculo laboral o contractual en las empresas, con la condición de no excluir a ninguna.

México

El 25 de enero pasado, México autorizó que los gobiernos estatales y el sector privado puedan adquirir las vacunas anticoronavirus, según un acuerdo publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF).

El documento establece que se trata de «una acción extraordinaria en materia de salubridad general», que los gobiernos estatales, así como las personas físicas y morales de los sectores social y privado, «coadyuven con la Secretaría de Salud Federal en la implementación de la Política Nacional de Vacunación contra el virus SARS-CoV-2 para la prevención de la covid-19 en México».

El texto indica que, dentro de esta autorización, los privados deberán presentar los contratos que suscriban con las farmacéuticas autorizadas en México, informar sobre la cantidad de dosis de las vacunas adquiridas y respetar el calendario, así como la prioridad por grupos de personas, establecidos en el plan de vacunación nacional.

En Honduras

El Gobierno hondureño también autorizó a los privados acceder a la compra de vacunas, mediante un acuerdo denominado «Honduvac».

El Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) publicó el mecanismo para la adquisición, en el que informa que es el único autorizado por el Gobierno para la compra, mediante negociaciones en forma directa con empresas farmacéuticas que producen el fármaco, con la asistencia de la Secretaría de Salud y el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS).

Para ello, deben de levantar un listado de necesidades para determinar la cantidad de vacunas que se requieren y, conforme a ello, gestionar la compra «para la inocular a los trabajadores y familiares de estos».

En Paraguay

El pasado 18 de marzo, el Viceministerio de Rectoría y Vigilancia de la Salud de Paraguay emitió un comunicado en el que informa sobre la habilitación de la compra de las vacunas contra el covid-19 a todas las empresas interesadas.

En el documento, no obstante, señala como condición que sean vendidas a la cartera sanitaria para la posterior aplicación gratuita de las dosis.

Las firmas interesadas deberán contar con el registro sanitario y las cantidades a importar serán acordadas con el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social, y se comunicará a la Dirección Nacional de Vigilancia Sanitaria para su autorización.

Además de estos países, la semana pasada el ministro de Salud de Panamá, Luis Francisco Sucre, dijo que el Gobierno de ese país está dispuesto a que las empresas privadas importen vacunas contra el coronavirus, siempre que cumplan con una serie de requisitos, entre ellos, tener el registro y aprobación de la Dirección de Farmacias y Drogas del país, para comprobar que los fármacos son seguros para la población.