¿Qué medidas toma EE.UU. para paliar la grave escasez de leche infantil?
La Casa Blanca comunicó este jueves que EE.UU. importará desde Suiza «la cantidad equivalente a 1,5 millones de botellas de 8 onzas» (unos 227 gramos) de fórmula para bebés. El anuncio se produce en medio de la grave crisis de escasez de ese producto infantil debido al cierre temporal de una planta de Abbott Nutrition, uno de los principales productores de preparados para lactantes en el país norteamericano.
Según detalló la oficina presidencial de EE.UU., el Departamento de Defensa actualmente «está tramitando la solicitud del Departamento de Agricultura» para transportar desde la ciudad suiza de Zúrich hasta Plainfield (Indiana) tres fórmulas producidas por la empresa Nestlé S.A.: Alfamino Infant, Alfamino Junior y Gerber Good Start Extensive HA. Se trata de «fórmulas hipoalergénicas para niños con alergia a la proteína de la leche de vaca».
Invocación de la Ley de Producción de Defensa
El suministro se realizará en el marco de la operación ‘Fly Formula’, que el presidente estadounidense, Joe Biden, puso en marcha este miércoles, autorizando al Departamento de Agricultura y el de Salud y Servicios Humanos a utilizar aviones comerciales contratados por el Departamento de Defensa para recoger en el extranjero los preparados para lactantes que cumplan con las normas de salud y seguridad de EE.UU.
Asimismo, Biden invocó la Ley de Producción de Defensa para garantizar que «los fabricantes tengan los ingredientes necesarios para hacer fórmulas infantiles seguras y saludables» en el territorio estadounidense. «El presidente exige a los proveedores que dirijan los recursos necesarios a los fabricantes de fórmulas infantiles antes que a cualquier otro cliente que haya pedido ese producto», explicó la Casa Blanca.
Una nueva ley para proteger a las familias de bajos ingresos
Por su parte, el Senado de EE.UU. aprobó este jueves por unanimidad un proyecto de ley que pretende proteger a las familias de bajos ingresos de la escasez de preparados para lactantes, informa The Hill. A última hora del miércoles, la Ley de Acceso a la Fórmula Infantil fue aprobada por la Cámara de Representantes, y ahora se dirige a la mesa del mandatario para que la firme.
La legislación pretende ampliar las flexibilidades concedidas durante la pandemia al programa gubernamental de nutrición para mujeres, bebés y niños (WIC, por sus siglas en inglés). Actualmente cada estado adjudica un contrato de proveedor único a un fabricante de leche de fórmula para que proporcione su producto a los participantes en el programa WIC, que, en consecuencia, solo pueden canjear su cupón por la leche de fórmula elaborada por el fabricante que tiene el contrato para esa región.
El proyecto de nueva ley permitiría al Departamento de Agricultura renunciar a las restricciones contractuales del WIC durante emergencias, desastres e interrupciones de la cadena de suministro, lo que significa que las familias podrían utilizar los beneficios del WIC para comprar cualquier fórmula disponible.
Sin embargo, es dudoso el destino de otro proyecto de ley para proporcionar a la Administración de Alimentos y Medicamentos (la FDA) 28 millones de dólares en fondos de emergencia. La norma fue aprobada por la Cámara de Representantes por 231 a 192, pero los senadores del Partido Republicano han expresado su temor a gastar el dinero.
Acuerdo para reanuda la producción en la planta paralizada de Abbott
Mientras, Abbott Nutrition anunció este lunes que ha acordado con la FDA un plan para reanudar las operaciones en su planta en Míchigan, que en marzo fue cerrada por razones sanitarias. Según detalló la compañía, el acuerdo con la FDA establece «los pasos necesarios para reanudar la producción y mantener las instalaciones», aunque está sujeto a la aprobación judicial.
Abbott –que es uno de los cuatro gigantes que controlan el 90 % del mercado de leche infantil en EE.UU.– señaló que, una vez que se le dé oficialmente luz verde, podría reanudar las operaciones en esa planta dentro de dos semanas, y que tomaría de seis a ocho semanasmás para que el producto, que acusa en todo EE.UU. una aguda escasez, esté de vuelta en los estantes.
La planta quedó paralizada luego de que los inspectores federales comunicaran en marzo que habían encontrado en las instalaciones muestras de una bacteria mortal conocida como ‘Cronobacter sakazakii’. Sin embargo, la compañía asegura que todavía no hay pruebas que vinculen su fórmula con cuatro casos de enfermedad en infantes, que incluyen dos muertes. «Todos los productos retenidos que fueron analizados por Abbott y la FDA durante la inspección de las instalaciones dieron negativo para ‘Cronobacter sakazakii’ y salmonela. No se encontró salmonela en las instalaciones de Sturgis», reza un comunicado. El documento sostiene que el ‘Cronobacter sakazakii’ que se encontró en las pruebas ambientales durante la investigación fue detectado en zonas de la instalación que «no estaban en contacto con el producto, y no se ha relacionado con ninguna enfermedad infantil conocida».