Las autoridades ucranianas deben ordenar a los militares cercados en la planta siderúrgica Azovstal de Mariúpol que depongan las armas, ha afirmado este martes el presidente ruso, Vladímir Putin, en conversación telefónica con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan.

«Las autoridades de Kiev deben asumir su responsabilidad política y, por razones humanitarias, ordenarles que depongan las armas. A los prisioneros de guerra se les garantiza la vida, la atención médica y el trato de acuerdo con las normas de derecho internacional», dijo el mandatario ruso.