«Profanaron su memoria»: Polémica en Alemania por el entierro de un conocido neonazi en la parcela de un erudito judío

El entierro de un destacado activista neonazi en la antigua parcela de un musicólogo judío en un cementerio a las afueras de Berlín ha desatado una polémica en Alemania y ha derivado en una denuncia contra las personas responsables por «perturbar la paz de los muertos», reportan medios locales.

Henry Hafenmayer, que fue enterrado el pasado viernes, se había ganado estatus de mártir en los círculos de la extrema derecha alemana tras ser condenado a prisión por una serie de cartas antisemitas dirigidas a instituciones públicas, en las que calificaba el Holocausto de «falacia».

Las imágenes del entierro difundidas por algunos medios muestran la urna de Hafenmayer depositada en la parcela funeraria frente a la lápida del judío Max Friedländer, un cantante y estudioso de la música prusiana que falleció de un derrame cerebral en la capital alemana en 1934 (aunque sus restos en 1980 fueron trasladados a otro lugar).

Una tela negra sobre la lápida

Según medios locales, la ceremonia fúnebre concentró a conocidos neonazis, como el abogado Horst Mahler, que en su día fue sentenciado a seis años de prisión por incitación al odio y negación del Holocausto. Asimismo, durante la ceremonia se exhibieron símbolos del Reich o al menos con características similares. Sobre la lápida del musicólogo judío colocaron una tela negra, en la que pusieron el nombre del antisemita fallecido a los 48 años.

Se informa que el comisionado de antisemitismo de Berlín, Samuel Salzborn, presentó una denuncia contra los responsables por «perturbar la paz de los muertos». El Consejo Central de Judíos en Alemania también denunció los hechos. «Al hacerlo, profanaron la memoria de Max Friedländer», dijo el presidente de la institución, Josef Schuster.