Portavoz de la Cancillería rusa tilda de «cínico desalmado» al presidente ucraniano por su versión del origen de proyectiles caídos en Donbass

Las declaraciones del presidente de Ucrania, Vladímir Zelenski, en las que aseguró que las autodefensas de Donbass son las que disparan a su propio territorio solo pueden pertenecer a un «cínico desalmado», según ha afirmado la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova.

Los comentarios del mandatario ucraniano se emitieron este sábado durante su intervención en la Conferencia de Seguridad de Múnich (Alemania). En el evento se pronunció sobre los informes de la caída de proyectiles en los territorios autoproclamados en el este de Ucrania y que procedían del lado controlado por militares ucranianos de la línea de contacto en esta zona de conflicto, que ha visto una escalada desde el miércoles.

«Todo esto son provocaciones, son puras mentiras, no hay muertos ni heridos allí, esto es simplemente cinismo de tal nivel que ellos mismos están socavando, que ellos están disparando«, dijo Zelenski.

La vocera de la Cancillería reaccionó a través de su canal de Telegram, afirmando que quisiera «dejar las emociones a un lado» aunque «es difícil hacerlo en este caso».

«Solo un cínico desalmado puede hacer declaraciones del tipo que ‘disparan ellos mismos’ sobre los residentes de Donbass, tomando en cuenta el número de personas que han fallecido en las regiones de Donetsk y Lugansk en los últimos años», expresó Zajárova, refiriéndose a las dos repúblicas autoproclamadas de la región.

La funcionaria señaló también que la misión especial de monitoreo de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) que registra los disparos en la zona del conflicto «reporta que hay considerablemente más ataques de parte de las fuerzas controladas por Kiev«.

«Tal vez, por esta razón Washington retiró a los observadores de ciudadanía estadounidense de esta misión para que no haya testigos entre los estadounidenses, ya que podrían acusar a su Gobierno de mentir», indicó.

  • Los observadores de la OSCE registraron el miércoles en Donbass 591 violaciones del alto al fuego, incluidas 316 explosiones, una cifra significativamente más alta que en los días anteriores.

  • El viernes, los líderes de Donetsk y Lugansk instaron a la población a evacuar hacia Rusia ante una posible ofensiva de Kiev, pero exhortaron a los hombres a quedarse y proteger su territorio. Según el líder de Donetsk, Denís Pushilin, la situación es crítica y Kiev puede lanzar una ofensiva a gran escala contra Donbass en cualquier momento.
  • Mientras los ciudadanos evacuan hacia Rusia, se han intensificado los ataques al territorio de Donbass desde las posiciones de las fuerzas gubernamentales de Ucrania.
  • En las semanas previas a la última escalada del conflicto, diversos países de Occidente suministraron armas e instructores a las Fuerzas Armadas de Ucrania, que posicionaron como ayuda a la nación contra la «inminente» invasión rusa, tal y como ha estado asegurando la propaganda mediática occidental.
  • Moscú ha refutado reiteradamente estos señalamientos y advertido que la militarización de Ucrania está tanto agravando la crisis política dentro del país como amenazando a la estabilidad en Europa.
  • Kiev ha estado sumido en un conflicto con los dos territorios desde 2014, cuando dichas regiones se proclamaron independientes tras el golpe de Estado en el país.

  • Tras la violencia desatada por la ofensiva lanzada por Kiev para recuperar el control sobre Donbass, el conflicto se encontraba en una fase pasiva gracias a esfuerzos internacionales, que no obstante, no facilitaron una resolución.

  • Las autoridades ucranianas y países occidentales han acusado a Rusia de apoyar a los rebeldes y fomentar el conflicto.

  • Moscú niega ser parte de la guerra civil y no reconoce oficialmente a las colindantes repúblicas separatistas rusohablantes, pero condena los esfuerzos de Kiev de resolver el conflicto con fuerza.