Durante un operativo policial realizado la noche del sábado en una discoteca de la capital peruana, al menos 13 personas murieron y otras seis resultaron heridas, incluidos tres efectivos de la Policía, informan medios locales. Los hechos ocurrieron después de las 21.00 (hora local), cuando los oficiales intervinieron en el lugar a petición de los vecinos de la zona.

Según la versión de la Policía, en el lugar había reunidas más de cien personas en un espacio muy reducido. El incidente se produjo cuando al ver entrar las fuerzas de seguridad, los asistentes intentaron escapar, lo que derivó en una aglomeración en la única salida, donde se atropellaron y aplastaron.

Los familiares de las víctimas denunciaron que el pánico se desató entre los asistentes a la fiesta debido a los gases lacrimógenos arrojados por los agentes.

«Parece que la Policía ha entrado y les ha tirado bombas lacrimógenas y los han encerrado y parece que esa gente ha muerto asfixiada», contó a RPP Noticias un vecino del barrio.

La utilización de algún tipo de arma o bomba lacrimógena fue descartada en un comunicado por el Ministerio del Interior. El general de la Policía Nacional, Orlando Velasco, calificó esta versión de desinformación.

Desde el Ministerio precisaron que la fiesta se organizó pese a la prohibición de reuniones sociales debido al estado de emergencia por la pandemia del coronavirus. El organismo expresó sus condilencias por la muerte de 13 personas y afirmó que otras 23 han sido detenidas «para identificar a los dueños del local y responsables de este lamentable hecho».