Grecia anunció haber completado la extensión del muro fronterizo con Turquía como parte de sus esfuerzos para detener una posible ola de migrantes afganos provocada por la toma del poder de los talibanes.

La valla de 40 kilómetros en la frontera cuenta con un nuevo sistema de monitoreo electrónico automático para detener a los migrantes que intentarán llegar a Europa en los próximos meses.

«La crisis afgana crea nuevos hechos en la esfera geopolítica y al mismo tiempo crea la posibilidad de flujos migratorios«, expresó el ministro griego de Protección Ciudadana, Michalis Chrisochoidis, después de visitar la región de Evros.

Los eventos en Afganistán han aumentado los temores en la Unión Europea de una crisis migratoria similar a la de 2015, cuando casi un millón de personas que huían de la guerra y la pobreza en Oriente Medio cruzaron las fronteras.

Grecia, que estaba en la primera línea de aquella crisis, afirma que sus fuerzas fronterizas están en alerta para asegurarse de que la nación no se convierta nuevamente en una puerta de entrada irregular.

La UE considera que es «imposible» evacuar a todos sus aliados de Afganistán antes del 31 de agosto y culpa a EE.UU. de obstaculizar las tareas

«Como país, no podemos permanecer indiferentes a las posibles consecuencias», manifestó Chrisochoidis, añadiendo que las «fronteras permanecerán seguras e inviolables«.

Mientras tanto, el mandatario turco Recep Tayyip Erdogan advirtió a sus vecinos que «Turquía no tiene ningún deber, responsabilidad u obligación de ser la unidad de almacenamiento de migrantes de Europa«. Asimismo, el presidente señaló que su Gobierno ha estado fortaleciendo la seguridad a lo largo de la frontera con Irán con la presencia de militares y un nuevo muro.

* El movimiento talibán, designado como «organización terrorista» por el Consejo de Seguridad de la ONU, está declarado como grupo terrorista y prohibido en Rusia.