Las nuevas plantas de Tesla en Alemania y Texas (EE.UU.) están perdiendo «miles de millones de dólares» mientras intentan aumentar la producción de vehículos eléctricos, debido a la escasez de baterías y problemas en la cadena de suministro, declaró el director ejecutivo de la compañía, Elon Musk.

«Tanto las fábricas de Berlín como las de Austin son gigantescos hornos de quemar dinero en este momento, ¿bueno? Es realmente como un rugido gigante, el sonido del dinero en llamas», indicó el magnate el pasado 31 de mayo en una entrevista con Tesla Owners Silicon Valley, publicada este miércoles.

La planta de Texas, que se inauguró oficialmente en abril, produce «una cantidad muy pequeña» de automóviles, ya que la compañía tuvo problemas para impulsar la producción de sus nuevas celdas 4680, mientras que las herramientas necesarias para fabricar las celdas 2170, más antiguas, que se usan en sus otras plantas y con las que pretendían reemplazar las nuevas, «están atascadas» en los puertos de China, explicó Musk.

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No obstante, aseguró que «todo esto se arreglará muy rápido», pero que «requiere mucha atención». «Costará más esfuerzo llevar esta fábrica a una producción de alto volumen que lo que llevó construirla», apuntó el directivo, agregando que la situación también se aplica a la planta de Berlín, inaugurada en marzo, aunque se encuentra en una «posición ligeramente mejor», al estar equipada para construir autos con celdas 2170.

«Los dos últimos años han sido una auténtica pesadilla de interrupciones en la cadena de suministro, una cosa tras otra, y todavía no hemos salido de ella», señaló Musk, agregando que actualmente la mayor preocupación de Tesla «es cómo mantener las plantas en funcionamiento para poder pagar a la gente y no ir a la quiebra«.

Sus comentarios surgen en medio de los recortes generalizados de empleos en la compañía. El martes, Musk confirmó que Tesla disminuirá su plantilla de empleados asalariados en los próximos tres meses. «Esperamos ver una reducción de aproximadamente el 10 % de la mano de obra asalariada, que, en realidad, es solo una reducción del 3,5 % de la plantilla total», declaró.