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Mercedes-Benz Vision EQXX, un coche eléctrico conceptual con 1.000 kilómetros de autonomía, diseño estrafalario
y techo solar.

Mercedes-Benz quiere apostar por la autonomía para diferenciarse de su competencia. El fabricante alemán ha presentado este lunes, poco antes del inicio del CES 2022, el Vision EQXX. Se trata de un prototipo de coche eléctrico altamente eficiente que, según la compañía, podrá recorrer 1.000 kilómetros con una sola carga.

La compañía asegura que el Vision EQXX podrá alcanzar ese excepcional rango gracias a un consumo de menos de 10 kilovatios hora (kWh) por cada 100 kilómetros. Según la nota prensa de Mercedes-Benz, el mencionado consumo equivale a usar una secadora o un equipo de aire acondicionado durante tres horas.

Mercedes-Benz Vision EQXX, una base para futuros coches de producción

En lugar de aumentar el tamaño de las baterías para conseguir más alcance, el equipo de desarrollo creó un paquete completamente nuevo. Las nuevas baterías tienen una densidad cercana a los 400 Wh/L, son mucho más livianas y aprovechan mejor el espacio disponible en la plataforma.

El Vision EQXX también contará con la ayuda de 117 células fotoeléctricas instaladas en el techo. Según Mercedes, esta características podría agregar hasta 25 km de alcance en viajes de larga distancia, aunque, eso sí, en condiciones ideales.

Los 1.750 kg de peso bruto del coche y sus líneas aerodinámicas (posee un coeficiente de arrastre de solo 0,17) también juegan a favor para llegar a los 1.000 kilómetros de autonomía. De esta forma, el Vision EQXX queda por encima de coches del mercado como la del Lucid Air (837 kilómetros) y la del Tesla Model S Long Range Plus (647 kilómetros).

Es preciso señalar que la autonomía declarada por Mercedes-Benz es producto de una simulación realizada por ordenador «en condiciones de tráfico de la vida real». La automotriz aún no ha probado al prototipo el coche en un escenario real, no obstante, eso sucederá pronto. El Vision EQXX rodará por caminos con diferentes características este verano.

Por otra parte, el diseño del Vision EQXX no pasa desapercibido. Las líneas exteriores como las interiores hablan de futuro. Por fuera destaca el plateado del acero de ultra alta resistencia y por dentro una enorme pantalla de 47.5 pulgadas que se extiende por todo el ancho del salpicadero del vehículo.

En concreto, el Vision EQXX como tal no se convertirá en un coche que veremos por las calles, pero es una guía que sirve para comprender cómo Mercedes-Benz imagina el futuro. La compañía dice que muchas de las tecnologías aplicadas a este vehículo se volcarán en coches de producción en los próximos dos o tres años.

Lo cierto es que Mercedes-Benz no quiere quedarse atrás en la carrera por el coche eléctrico. El año pasado anunció sus planes de invertir más de 40 mil millones de euros hasta 2030 para impulsar el desarrollo y la fabricación de nuevos coches eléctricos y baterías.