Médico de Barcelona niega que el diurético se usó para tapar sustancias

Gustavo Peralta, médico de Barcelona, explicó la tarde del jueves que el diurético que arrojó la prueba doping realizada a Michael Arroyo fue parte de un tratamiento terapéutico por problemas de cálculos renales.

“Es lamentable tener que exponer acá que Michael (Arroyo) sufre un trastorno de ansiedad desde 2016 cuando estaba en otro equipo y fue tratado con un medicamento que se llama mirtazapina, este provoca cálculos renales (…). Fue así que una semana previa al Clásico del Astillero tuvo un evento de cálculos renales y fue tratado con hidroclorotiazida, más keterolaco”.

Para el galeno, la sola presencia del diurético no debe representar un caso de dopaje, ya que el elemento “debe estar mezclado con alguna sustancia prohibida” y al no estar se explica que es un tratamiento médico.

Para la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) el uso de diuréticos podría llevar a enmascarar otras sustancias prohibidas, pues su función es aumentar el flujo de la orina y con ello eliminar los líquidos del cuerpo.

Peralta aseguró que en los resultados del examen de Arroyo no se muestra la cantidad del componente encontrado. “Un diurético no genera que el rendimiento mejore en el campo de juego, al contrario, deshidrata al jugador, y es eso lo que se está penalizando en este momento”.

El galeno también aclaró que nunca intentó evitar que Arroyo se realice los exámenes médicos y explicó que el doctor Luis Plúas (de la FEF) “aceptó salir a un centro hospitalario”, ya que el jugador presentaba una lesión en su rodilla derecha.

Por su parte, el síndico de Barcelona, Jorge Reinoso, aseguró (la tarde del jueves) que no habían recibido las notificacionesoficialesde las sanciones de Arroyo y Peralta, y que por esa razón no podían iniciar el proceso de apelación, que les permite el reglamento y la ley.

“No estamos conformes con la sanción (a Arroyo y Peralta) fue totalmente desproporcionada. No consideraron (los miembros de la Comisión) los asuntos médicos y se habla con tanta ligereza de dopaje”. (I)