Matan a dos personas en la Macrozona Sur de Chile el mismo día en que extienden el estado de emergencia
La Macrozona Sur de Chile registró este martes dos muertes violentas protagonizadas por grupos de desconocidos que habrían concretado los ataques, el mismo día en que el Congreso determinó extender el estado de excepción constitucional de emergencia por séptima vez consecutiva.
Un joven trabajador mapuche
El primero de los homicidios se produjo contra un joven trabajador forestal mapuche de 22 años. El atentado se desarrolló en un sector llamado Butamalal, a unos 20 kilómetros al oriente de Cañete, en la Provincia de Arauco, Región del Biobío.
Según la información de Carabineros, una docena de hombres encapuchados ingresó al predio e intimidó a los trabajadores, empezando a disparar. Andrés Cristian Millanao Cayupe, quien estaba usando su maquinaria, fue herido de gravedad por un disparo en la espalda, y murió en el Hospital Intercultural Kallvu Llanka de Cañete.
El crimen se produjo unas horas antes de que el Poder Legislativo debatiera una nueva extensión del control militar en cuatro provincias: Bío Bío y Arauco, en la Región del Bío Bío; y Cautín y Malleco, en La Araucanía. Finalmente, el Ejecutivo de Sebastián Piñera obtuvo el visto bueno de los legisladores, mientras se intenta dar respuesta a la tensión en la zona, donde los reclamos territoriales mapuches derivaron en atentados, enfrentamientos y represivos operativos de seguridad.
Emboscada contra la camioneta de un agricultor
Más tarde, se dio a conocer el segundo asesinato de la jornada: Joel Ovalle, un agricultor de 68 años y presidente de la Junta de Vigilancia de Alboyanco en la jurisdicción de Angol, habría sido emboscado por un grupo de desconocidos mientras manejaba su camioneta por la Ruta R-340, en el tramo que une Alboyanco con Collipulli. Según Carabineros, le dispararon seis veces al vehículo, tras haberlo seguido por varios minutos.
Las autoridades locales indicaron que uno de los disparos impactó en la cabeza de Ovalle, quien fue trasladado al Hospital de Angol con un pronóstico grave: pérdida de masa encefálica, sumado a otras heridas en sus extremidades, producto de la balacera. A las 18:30 (hora local), se confirmó el fallecimiento.
La víctima ya había cobrado protagonismo en este contexto de tensión años atrás: «Si me tocan a uno de mis trabajadores, yo obviamente voy a tocar a cinco de ellos», había dicho en junio del 2014, citó La Tercera.
Con este contexto, el Senado prolongó el estado de emergencia hasta el 9 de febrero. Según el ministro de Defensa, Baldo Prokurica, desde que inició esta medida de control los actos violentos se redujeron en un 43 %, las usurpaciones un 73 %, se decomisó una tonelada y media de droga y se produjeron más de 4.500 operativos militares mixtos.
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