Lula logra postergar un interrogatorio para ser recibido por el papa Francisco en el Vaticano

El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva viajará a Roma la próxima semana donde será recibido por el papa Francisco, por lo que sus abogados solicitaron a la Justicia Federal aplazar su interrogatorio en el marco de la Operación Zelotes, en el que se le acusa de corrupción pasiva.

En la petición enviada al juez Vallisney de Souza Oliveira, la defensa de Lula explicó que el líder del Partido de los Trabajadores (PT) «será recibido en audiencia por su Santidad, el papa Francisco, el 13 de febrero». El interrogatorio estaba programado para el 11 y el viaje se realizará entre el 12 y 15 de febrero.

Desde la asesoría de Justicia Federal de Brasilia, según O Globo, se informó que se está revisando una nueva fecha para su interrogatorio este mes.

La Operación Zelotes investiga un supuesto esquema de fraudes y sobornos para posibilitar que determinadas empresas del sector automotriz no cumplieran con sus obligaciones tributarias.

Precisamente esta semana, la Justicia rechazó la denuncia del Ministerio Público Federal (MPF) contra Lula por supuestamente incitar en 2018 a ocupar el triplex de Guarujá, en Sao Paulo, por el que fue condenado. La jueza Lisa Taubemblatt argumentó que no hay pruebas conclusivas de que Lula ordenase la invasión de la vivienda.

Reunión con el papa Francisco

La reunión entre Lula y el sumo pontífice fue negociada por el presidente de Argentina, Alberto Fernández, quien cuando todavía era candidato presidencial viajó a Brasil para visitar al líder del PT en prisión. El exlíder sindical fue liberado en noviembre tras permanecer 19 meses en la cárcel.

«Lula me pidió ver al Papa. Y yo le pedí si podía recibir a Lula. El me dijo que ‘claro’ y que le escribiese [Lula] porque con todo placer le recibiría», dijo Fernández a la prensa tras su encuentro con el pontífice el 31 de enero.

Ya en agosto de 2018, según el diario O Estadao, cuatro meses después del arresto de Lula, Fernández intentó organizar una reunión entre el papa Francisco y el entonces canciller Celso Amorim para dar visibilidad internacional al caso del petista.

En mayo de 2019, el pontífice mandó una carta a Lula a prisión pidiéndole que no se desanimase. «El bien vencerá al mal, la verdad vencerá a la mentira y la Salvación vencerá a la condena», escribió el papa, según el diario brasileño.