López Obrador explica por qué no le gusta que erijan estatuas en su honor

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, hizo referencia este lunes a la estatua erigida en su honor, en el municipio de Atlacomulco, en el estado de México, que fue derribada algunos días después de ser develada.

Durante su conferencia matutina, el mandatario agradeció al exalcalde de Atlacomulco, Roberto Téllez Monroy, del oficialista Movimiento Regeneración Nacional (Morena), por erigir una estatua suya. No obstante, López Obrador aseguró que, si le hubiesen preguntado, «los hubiese convencido» de no levantar la obra en su honor.

«Yo les agradezco mucho por sus buenas intenciones, pero que también me hagan caso porque no me gusta lo que tenga que ver con la vanidad, el culto a la personalidad«, afirmó el presidente mexicano.

Así, López Obrador reiteró que no le gusta que su nombre se utilice para designar «a calles, a parques, a bibliotecas y a escuelas». En cambio, expresó su beneplácito porque sea «la gente» quien «tenga su criterio sobre lo que ha representado y seguirá representando» su Gobierno.

El mandatario evitó entrar en la polémica por el derribo de la escultura de 1,8 metros de altura que fue diseñada en cantera rosa por artesanos del municipio de Tlalpujahua, en el estado de Michoacán.