El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, cumple sus primeroscien días de gobierno con una crisis económica agudizada por la pandemia y una apuesta por una intensa campaña de vacunación.

Con 17,5 millones de habitantes en el país, el mandatario prometió la inoculación del 60 % de la población, unos nueve millones de personas, en sus primeros 100 días en el poder, pero todavía se necesitarán unos días más para alcanzar esa meta.

El Ministerio de Salud anunció que, tras superar el lunes los 8,4 millones de personas vacunadas con el esquema completo, quedan nueve días para llegar al objetivo.

Sin embargo, algunos expertos señalan que el Ejecutivo se centró en las vacunas, pero no en la asistencia hospitalaria de los contagiados. «El 50 % del plan de vacunación está cumplido, pero falta esta voluntad del Gobierno de dar recursos a la salud pública», comentó a RT Ramiro Aguilar, jurista y político.

En su opinión, el mandatario estuvo preparándose para ganar las elecciones, pero «desde su victoria no sabe qué hacer, porque carece de un buen equipo de trabajo«.

Aguilar añadió que el presidente no solo ha demostrado que «no tiene un plan económico, político o social«, sino que todavía «está en el festejo». «El gran resumen de los primeros 100 días del gobierno de Lasso es que sigue festejando el triunfo», afirma.

Durante su campaña electoral, Lasso prometió elevar el salario mínimo a 500 dólares, generar al menos dos millones de puestos de trabajo y reducir el gasto público, entre otras cosas.

Pero el experto destaca que el mandatario pretende «implantar unas reformas a la ley donde se debiliten los derechos a los trabajadores, incluyendo el derecho a recibir una indemnización en el caso de ser despedidos». «Es un gobierno en conflicto que no sabe bien qué quiere y a quién servir y no sabe cómo administrar los recursos», sentencia.

Primera movilización nacional

Este mes de agosto, el presidente enfrentó la primera movilización nacional de cientos de trabajadores ecuatorianos en contra de su Ejecutivo y para exigir el congelamiento del precio de los combustibles.

La protesta nacional fue convocada por el Frente Unitario de Trabajadores (FUT), la mayor central obrera ecuatoriana, y recibió el apoyo de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), que acusa a Lasso de cerrar «toda opción de diálogo» para resolver los problemas económicos que aquejan a la mayoría de los ecuatorianos.

El Gobierno ecuatoriano de Guillermo Lasso enfrenta la primera movilización sindical nacional

Más de 532.000 personas perdieron su trabajo en el país durante estos meses de pandemia, mientras que en el primer trimestre de 2021 se registró una caída de 5,6 % del PIB frente al mismo período de 2020.

Por otro lado, el analista recordó que la ola migratoria ecuatoriana hacia los EE.UU. a través de México es «muy seria, muy grave y muy importante». Según informó el viceministro de Movilidad Humana, Carlos Velástegui, siete de cada diez ecuatorianos que ingresan a México son detenidos al intentar pasar irregularmente a EE.UU. Y entre enero y julio de 2021, según medios locales que citan fuentes gubernamentales, 88.696 ecuatorianos han viajado hacia México, de los cuales 34.771 retornaron.

Mientras, la semana pasada, Lasso y su homólogo mexicano, Andrés Manuel López Obrador, se comprometieron a adelantar las gestiones para acelerar la incorporación de Ecuador a la Alianza del Pacífico, una iniciativa de integración regional en materia económica. Está conformada por Chile, Colombia, Perú y México y cuenta con un total de 59 Estados observadores, incluyendo Ecuador.

Críticas en las redes

La críticas a la escasa inversión en salud pública del Ejecutivo se sintieron en las redes sociales, donde también se denuncia la crisis que sufre la educación superior, el empleo o un sistema carcelario afectado por motines y hacinamientos.

«Tenemos plan de vacunación, pero la salud pública está en crisis; la educación superior está en crisis; el sistema carcelario está en crisis. Vienen leyes laborales precarizadoras; desempleo e informalidad en aumento. Ah, pero tenemos logos nuevos», ironizó la periodista Gabriela Lizarzaburu en Twitter.

Muchos internautas también ponen el acento en la destrucción de lo público por parte de Lasso, una política similar a la de su antecesor, Lenín Moreno.

«Cerca de 100 días del Gobierno del Encuentro de Lasso y más promesas incumplidas que cumplidas. Es más, una sensación de destruir a una velocidad feroz todo lo público. No hay medicinas en hospitales y la educación sufre a cada paso. El Ecuador es el que pierde, una vez más», lamentó un usuario.

Los ecuatorianos también denuncian los recortes en las becas para los estudiantes de pocos recursos. «¡Qué barbaridad! El gobierno indolente del banquero bachiller, recorta en más de 12 millones de dólares el dinero destinado para las becas a estudiantes de escasos recursos», escribe el asambleísta Paco Hidalgo.