Expertos consultados este martes, por el medio ruso RBK, explicaron que la esperada actualización de la cadena de bloques Ethereum, programada para el próximo jueves, podría provocar un descenso en el rendimiento del proceso de minado de criptomonedas, así como una migración de usuarios a otras plataformas que aún operan con el modelo de ‘prueba de trabajo’ (PoW, por sus siglas en inglés).

El cofundador del proyecto de minería global de criptomonedas, BitCluster, Serguéi Arestov, explicó que una vez que se concrete la ‘fusión’ de las ‘blockchain’ Ethereum y Beacon Chain, para cambiar al modelo de ‘prueba de participación’ (PoS, por sus siglas en inglés), la complejidad para extraer divisas digitales aumentará hasta diez veces, por lo que ya no será un negocio rentable.

De acuerdo con Arestov, esto ocurrirá en caso de que la tasa de hash (capacidad de la red una criptomoneda para procesar operaciones matemáticas en cierta cantidad de tiempo) sea menor que el aumento de la complejidad de minado. Asimismo, detalló que aquellas granjas mineras, cuyos dispositivos consumen menos electricidad, podrán seguir operando, mientras que las restantes dejarán de funcionar.

El precio de Ethereum sube ante la esperada actualización de su red

Otra situación que podría suceder por la actualización de Ethereum es que algunos mineros descontentos bifurquen esta plataforma, es decir, habría una división en donde dos cadenas, que compartirían el mismo historial de contabilidad, llevarían a cabo por separado sus transacciones. Sin embargo, Arestov mencionó que las probabilidades de que esto pase son bajas.

Por su parte, el jefe de departamento de AMarkets, Artem Deev, precisó que tanto la dificultad del procedimiento de minado como las medidas regulatorias, que han sido impuestas por el Gobierno de EE.UU., la Unión Europea y Rusia, repercutirá en la rentabilidad de la industria de las monedas digitales.

Además, explicó que otros factores afectarán al mercado de las criptomonedas, entre los que destaca el aumento de los costos de los equipos, el incremento en los precios de la energía eléctrica, y el crecimiento del número de mineros.

«Por lo tanto, podemos decir que ahora la rentabilidad de la minería de criptomonedas sigue siendo atractiva», mencionó Deev, concluyendo que «la perspectiva para el futuro cercano ya inspira dudas: la minería será menos rentable para todos los activos».