La Embajada de Rusia en EE.UU. ha salido al paso de las acusaciones lanzadas por Washington acerca de la implicación de Moscú en los ciberataques lanzados contra páginas del Estado ucraniano y de bancos, y ha negado cualquier tipo de implicación en ellos.

«Negamos tajantemente las afirmaciones sin fundamento de la Administración [de EE.UU.] y señalamos que Rusia no tiene nada que ver con los hechos mencionados y que, en general, nunca ha realizado ni realiza operaciones ‘maliciosas’ en el espacio virtual», aseveró la Embajada de Rusia en EE.UU. a través de su cuenta en Twitter.

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Anteriormente, Anne Neuberger, que ocupa el cargo de viceasesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca para Ciberseguridad y Tecnologías Emergentes, responsabilizó a Rusia de los ciberataques que sufrió Ucrania esta semana. Según la funcionaria, la Casa Blanca tiene «información técnica» que vincula esos ataques al servicio de inteligencia de la Fuerza Armada de Rusia.

El pasado 15 de octubre, Ucrania denunció haber sufrido el mayor ataque DDoS (denegación distribuida de servicio) de su historia, que afectó a páginas de las Fuerzas Armadas y del Ministerio de Defensa, además de a importantes entidades financieras del país, como el Banco Estatal de Ahorros de Ucrania (Oschadbank).