La Corte Europea de Derechos Humanos condena a un tribunal italiano por fijarse en la «lencería roja» en un juicio por violación
La Corte Europea de Derechos Humanos repudió el dictamen de un tribunal italiano por violar el derecho al respeto de la vida privada de la demandante y «reproducir estereotipos sexistas». La instancia condenó a las autoridades judiciales italianas por referirse a la ropa interior roja de la mujer violada y a su bisexualidad, como supuestas muestras de su «actitud ambivalente hacia el sexo», al absolver en 2015 a seis hombres acusados de violación en grupo.
La polémica sentencia de un tribunal de Florencia en torno a un caso de 2008, cuando una estudiante de 22 años denunció que la habían violado siete hombres, alegó incoherencias en el relato de la víctima. Ahora, aunque la Corte Europea de Derechos Humanos no ha desafiado el veredicto como tal, sí criticó el lenguaje utilizado.
Este jueves, la corte dictaminó que la sentencia del tribunal florentino transmitía «prejuicios existentes en la sociedad italiana sobre el papel de las mujeres, que probablemente fueron un obstáculo para proporcionar una protección efectiva de los derechos de las víctimas de violencia de género, a pesar de un marco legislativo satisfactorio».
Asimismo, la corte obligó al Gobierno italiano a pagarle 12.000 euros a la mujer, en concepto de indemnización, y subrayó que las referencias «a la lencería roja», así como «los comentarios relativos a su bisexualidad, relaciones y relaciones sexuales ocasionales previas a los hechos en cuestión» fueron «injustificados».
La abogada de la demandante, Titti Carrano, se mostró satisfecha con la sentencia, que reconoce que «la autoridad judicial [italiana] ha pisoteado la dignidad» de su cliente.
«Por desgracia, no es el único caso en el que la no credibilidad de la mujer se basa en la vivisección de su vida personal y sexual. Esto ocurre a menudo en los tribunales civiles y penales italianos», comentó Carrano a la agencia ANSA, agregando que la sentencia del Tribunal de Apelación de Florencia planteó «estereotipos de género, minimizando así la violencia, y revictimizó a la demandante, utilizando además un lenguaje culpabilizador».