La Marina de Brasil está a punto de concluir la actualización de su escuadrón de aviones de ataque ligero Skyhawk con la entrega en breve de la última de las siete unidades que harán parte del Escuadrón Falcão, situado en São Pedro da Aldeia (Río de Janeiro), sede de la Fuerza Aeronaval de la Armada del país.

Los preparativos para la entrega del AF-1B comenzaron el 7 de marzo y se espera que tomen de tres a cuatro semanas, según confirmó el comando de la Marina esta semana al grupo informativo especializado en temas militares Janes Information Services.

El programa se lleva a cabo desde 2015 y consiste en la «modernización» de cinco AF-1 monoplaza y dos AF-1A biplaza al estándar AF-1B y AF-1C, un procedimiento que los mantendrá en vuelo en los próximos años sin problemas. Incluye la revisión del fuselaje y los motores, la instalación de «cabinas de vidrio», así como el reemplazo de sus equipos de navegación y comunicación (radares y computadoras) de nueva generación y sistemas eléctricos y de generación de oxígeno más avanzados.

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El fabricante aeronáutico brasileño Embraer se adjudicó el contrato en abril de 2009 por 106 millones de dólares. Inicialmente se pactó la actualización de nueve AF-1 y tres AF-1A, pero posteriormente ese número se redujo.

Las aeronaves estadounidenses Skyhawk de la Armada de Brasil se emplean para maniobras de ataque e intercepción como parte de la defensa aérea de sus fuerzas navales. Fabricados por la compañía Douglas Aircraft, cuentan con lanzacohetes, cámaras de reconocimientos, misiles aire-aire y capacidades de despegue desde portaaviones, entre otras prestaciones. El reducido peso y complejidad de este avión de combate lo ha convertido en uno de los más exitosos del mundo.

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