Un fiscal turco de la provincia de Eskişehir, al noroeste de Turquía, solicitó este jueves, una sentencia de hasta 18 años de prisión para un repartidor acusado de escupir en una pizza antes de entregársela al cliente, indica el medio local Hurriyet Daily News.

El hecho, ocurrido en diciembre de 2017, salió a la luz luego de que el propietario del edificio de departamentos notara el episodio mientras revisaba las imágenes de las cámaras de seguridad.

En las imágenes se veía al repartidor, identificado como Burak S., escupiendo en la pizza y filmando el episodio con su teléfono inteligente, antes de llamar a la puerta del cliente para entregar el pedido.

En un primer momento, el acusado tuvo que pagar una multa de 4.000 liras turcas (675 dólares) «por poner en peligro la salud del cliente». Desde entonces, se han realizado cinco audiencias de juicio, celebrándose la última este jueves, que concluyó luego de que los abogados del demandado solicitaran una prorroga adicional para preparar una declaración.