Finlandia reducirá el número de visados Schengen para los turistas rusos a una décima parte del nivel actual, informa la radiotelevisión pública Yle. El ministro de Asuntos Exteriores del país, Pekka Haavisto, afirmó que se dará la prioridad a quienes viajen por motivos familiares, de estudios o de trabajo.

Tras la remisión de la pandemia de coronavirus se produjo un aumento notable en el flujo de turistas desde Rusia, comentó el funcionario, que considera «inapropiado que Finlandia se haya convertido en un punto de tránsito para las vacaciones en Europa». Haavisto enfatizó que la limitación de la expedición de visas no será una violación de la normativa Schengen. Los cambios entrarán en vigencia en septiembre.

Asimismo, el Gobierno finlandés apoya la suspensión del acuerdo de simplificación del régimen de visados con Rusia. Si se elimina este acuerdo, el precio de la visa subirá de 35 a 80 euros.