Exgendarme deja una nota de suicidio y se desenmascara como un asesino buscado durante 35 años en París

Lo apodaban ‘Le Grêlé’, pero nunca se supo quién era ese asesino que aterrorizó a París a finales del siglo pasado. Ahora, un antiguo gendarme y policía, hallado muerto en Francia este miércoles, habría dejado una nota en la que confesó ser el autor de aquellos crímenes, informa Le Parisien.

Con la esperanza de resolver un caso que viene siendo investigado desde los años ochenta, la Brigada Criminal procura en estos momentos confrontar las muestras de ADN de varias decenas de exgendarmes.

Uno de los sospechosos, identificado como Francois Verove, de 59 años, se suicidó en su apartamento en Grau-du-Roi, cerca de Montpellier, tras ser citado para una entrevista y una prueba de ADN. De acuerdo con medios locales, el hombre, antes de quitarse la vida, habría dejado una carta de confesión en la que también afirmó que «no había hecho nada desde 1997».

Affaire Cécile Bloch – l’ ex-gendarme de 59 ans, François V. a été retrouvé mort dans son logement du Grau-du-Roi. Il laisse un courrier et avoue être le «Grêlé», tueur en série recherché depuis 35 ans. 😲 https://t.co/ibBUiTq4z4pic.twitter.com/SmATEal8rH

— Diego Perret (@diegoperret86) September 30, 2021

De acuerdo con Le Parisien, los resultados del análisis confirmaron este jueves que el ADN encontrado en las escenas de los crímenes atribuidos a ‘Le Grêlé’ se corresponden con el de Verove.

Su presunta carta pondría fin a 35 años de investigación en torno a una ola de asesinatos y violaciones que en las dos últimas décadas del siglo XX azotó a París. En 1986, una niña de 11 años fue encontrada violada y apuñalada en un sótano de la capital francesa, y pruebas forenses determinaron la presencia en el lugar del crimen de un hombre con rastros de viruela, una circunstancia atípica que dió lugar al apodo del asesino, ‘Le Grêlé’ (El Picado de Viruelas). También fue inculpado por un asesinato doble ocurrido en 1987 y otras seis violaciones.