Un policía británico que fue encarcelado por agredir a un adolescente y a un ciclista negros mientras estaba de servicio ha sido encontrado muerto. Las autoridades creen que se trata de un suicidio.

El agente Declan Jones, de 30 años, fue encontrado sin vida en casa de sus padres en Bromsgrove, Inglaterra, este martes. Los agentes acudieron al domicilio tras recibir una llamada de emergencia desde el lugar. «Lamentablemente, el hombre fue declarado muerto alrededor de las 12:45 horas. Creemos que no hay ninguna implicación de terceros en la muerte y se preparará un informe para el juez de instrucción», señaló un portavoz de la fuerza, citado por The Guardian.

Jones había sido despedido del cuerpo de Policía de West Midlands en septiembre mientras cumplía una condena de seis meses por agresión y uso excesivo de la fuerza en relación a dos episodios que tuvieron lugar en abril del año pasado.

En uno de los casos, el agente tiró al suelo a un ciclista negro de 44 años y lo golpeó en repetidas ocasiones tras acusarlo erróneamente de robar un teléfono y una bicicleta. Menos de 24 horas después, Jones fue captado en otro sector de la ciudad golpeando y pateando a un menor de 15 años, también de raza negra, tras sospechar equivocadamente que poseía drogas. Ambas agresiones quedaron evidenciadas en cámaras de seguridad.