Empleados de una planta de Renault, situada en el noroeste de Francia, bloquearon las instalaciones este martes en un intento de impedir la venta de la fábrica que produce piezas de automóvil. La protesta tuvo lugar en la subsidiaria Fonderie de Bretagne, en Caudan, que da empleo a 350 personas.

Renault denunció en un comunicado que un grupo de trabajadores retuvieron a siete miembros de la compañía e instó al «levantamiento del bloqueo y retorno a la calma», recordando que actualmente están buscando un comprador «para mantener las actividades del sitio y garantizar la continuidad de los empleos», proceso que «debe continuar con diálogo y calma».

Los altos cargos de la firma salieron de la planta en Caudan sobre las 22:30 de la noche aquel día.

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Por su parte, el delegado de la Confederación General del Trabajo de Francia (CGT), Maël Le Goff, explicó a France Bleu que no se trataba en absoluto de un secuestro, sino de un intento de diálogo que fracasó, y subrayó que los directivos «podrían salir cuando quisieran».

«Pedimos una discusión franca, pero no pudimos hablar con ellos todo el día. Nunca se habló de secuestro«, afirmó Le Goff, quien agregó que los jefes normalmente salen a las 21:00, dando a entender que se demoraron una hora más de lo habitual. «Se quedaron todo el día diciendo que estaban secuestrados, lo cual es absolutamente falso», agregó.