El primer ministro de Irak llama a no convertir el país «en un escenario para ajustar cuentas extranjeras» tras el ataque con misiles desde Irán

El primer ministro de Irak, Mustafa al Kadhimi, mantuvo este domingo una conversación telefónica con el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, comunicó la Oficina del líder iraquí.

Según se detalla, durante la llamada, que tuvo lugar horas después del ataque con misiles contra la capital del Kurdistán iraquí, Erbil, ambos discutieron «las relaciones bilaterales y el desarrollo de los acontecimientos».

Blinken expresó la solidaridad de EE.UU. con Irak y su apoyo a la seguridad y soberanía del país árabe. Por su parte, Al Kadhimi «destacó que el Gobierno continúa trabajando para fortalecer la soberanía del Estado iraquí […] en contra de cualquier ataque o cualquier perjuicio a la soberanía del país y la dignidad de sus ciudadanos».

«El primer ministro enfatizó que no se debe permitir que Irak se convierta en un escenario para ajustar cuentas extranjeras, y que Irak continúa fortaleciendo su papel activo a nivel internacional y regional», indica el comunicado.

También el domingo, el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, publicó una declaración, en la que reiteró el respaldo de Washington a «la plena soberanía, independencia e integridad territorial de Irak».

«Apoyaremos al Gobierno de Irak para que responsabilice a Irán y apoyaremos a nuestros socios en todo el Oriente Medio para que hagan frente a amenazas similares de Irán», señaló, afirmando que el ataque «tuvo como objetivo una residencia civil […] sin ninguna justificación».

El bombardeo tuvo lugar poco después de la medianoche, cerca del Consulado estadounidense, y dañó la sede de la televisión Kurdistan24, pero no provocó víctimas. Varias horas después, los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán se atribuyeron el ataque, afirmando que el objetivo de la acción eran intereses israelíes. El mismo día, el embajador de Irán en Bagdad, Iraj Masjedi, fue convocado al Ministerio de Relaciones Exteriores de Irak, donde obtuvo una nota de protesta.