El Departamento de Defensa de Estados Unidos anunció este martes la creación de una unidad especial para estudiar avistamientos aéreos inexplicables. El nuevo Grupo de Sincronización de Identificación y Gestión de Objetos Aéreos (AOIMSG, por sus siglas en inglés) será sucesor del Grupo de Trabajo sobre Fenómenos Aéreos No Identificados de la Armada del país.

La tarea principal de la nueva unidad será sincronizar los esfuerzos de todo el Pentágono y de otras agencias gubernamentales «para detectar, identificar y atribuir los objetos de interés en el espacio aéreo de uso especial, así como evaluar y mitigar cualquier amenaza asociada a la seguridad de vuelos y a la seguridad nacional».

«Las incursiones de cualquier objeto aéreo en nuestro espacio aéreo de uso especial plantean preocupaciones acerca de la seguridad de vuelo y de las operaciones», indica el comunicado del Departamento de Defensa, que subraya que se toma «muy en serio» los reportes sobre incursiones de todo tipo de objeto aéreo, ya sean identificado o no identificado, e investiga cada caso.

En las próximas semanas, el Pentágono aclarará cómo se implementará el nuevo programa, cuál será la estructura del grupo y de qué recursos dispondrá.

La decisión de crear un nuevo grupo especial se tomó en respuesta a un informe de la inteligencia estadounidense sobre avistamientos de objetos voladores no identificados percibidos por los militares del país norteamericano, publicado en junio de este año.

¿Qué reveló el informe de la inteligencia sobre los ovnis?

El documento calificó los reportes recopilados sobre ovnis como «en gran medida inconcluyentes» y reconocía que los analistas de defensa y agentes de inteligencia no pudieron determinar la naturaleza de los fenómenos descritos, aunque propuso cinco posibles escenarios.

El informe señalaba que los avistamientos podían deberse a un desorden aéreo (pájaros, globos, drones recreativos o desechos aéreos como bolsas de plástico); fenómenos atmosféricos naturales;programas de desarrollo industriales o del Gobierno de EE.UU.; sistemas de adversarios extranjeros o entraban en la categoría de «otros».

Los especialistas revisaron 144 incidentes inexplicables presenciados por el personal militar del país entre 2004 y 2021 y lo único que pudieron determinar fue que en la mayoría de los casos se trató de «objetos físicos«, ya que fueron registrados por sensores y radares infrarrojos y electro-ópticos, además de por percepción visual.

En 18 de los casos, se observaron patrones de movimiento o características de vuelo inusuales. Algunos ovnis «parecían permanecer inmóviles arriba en el aire, moverse contra el viento, realizar maniobras bruscas o moverse a una velocidad considerable, sin medios de propulsión discernibles», describe el documento.