Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la Organización Mundial de la Salud, señaló este lunes durante la sesión especial de la Asamblea del organismo internacional que el fin de la pandemia dependerá de alcanzar altos niveles de vacunación a nivel mundial, así como de la implementación de medidas para reducir su trasmisión.

Del mismo modo, destacó que «en cuanto más persista la desigualdad en [el acceso] a las vacunas, más oportunidades tendrá el virus de […] evolucionar de formas que no podemos predecir ni prevenir». En este sentido, hizo hincapié en el hecho de que «más del 80 % de las vacunas del mundo han ido a parar a los países del G20″; mientras que «los países de bajos ingresos, la mayoría de ellos en África, han recibido solo el 0,6 %«, por lo que hizo un llamamiento a revertir esta situación.