El Gobierno de EE.UU. diseña una estrategia para enfrentar a «cárteles gringos» que han desplazado a narcotraficantes mexicanos
El Departamento de Justicia de EE.UU. reconoce la existencia de cárteles de la droga en su territorio, que habrían ganado terreno frente a las redes de narcotraficantes mexicanos que operan en suelo estadounidense.
De acuerdo con un documento del Departamento de Justicia titulado ‘Estrategia contra los Cárteles Domésticos’, obtenido y publicado por la revista Proceso, los «cárteles gringos», como se les conoce comúnmente, ya no son dependientes de los cárteles mexicanos.
El periodista destaca que «por primera vez en su historia» el Gobierno de EE.UU. acepta y reconoce la existencia de cárteles de la droga estadounidenses.
«Son bandas domésticas distribuidas en el territorio nacional que ahora funcionan como organizaciones independientes de las agrupaciones criminales y trasnacionales dedicadas al tráfico, distribución y venta de narcóticos», señala el texto.
Según el hallazgo, las organizaciones criminales estadounidenses se articulan a partir de grupos de motociclistas. Varias de esas agrupaciones ya no dependen logísticamente de los cárteles mexicanos, pero les siguen comprando droga a estos últimos para luego distribuirla de manera independiente en EE.UU.
En este sentido, el documento revela que el Cártel de Sinaloa ha vendido drogas a los cárteles estadounidenses de Los Hermanos Pistoleros Latinos, New Mexico Syndicate, Los Carnales, Latin Kings, Mexican Mafia, Sureños, MS-13, Wet Back Power, Sinaloa Cowboys, West Texas Tangos, Los Negros, Arizona Mexican Mafia y Border Brothers.
El Cártel del Golfo, por su parte, habría colaborado con Los Hermanos Pistoleros Latinos, Partido Revolucionario Mexicano, Raza Unida y Texas Chicano Brotherhood.
El cártel de Los Zetas, uno de los más sanguinarios en la historia reciente de México, trabajaba con Barrio Azteca, Los Hermanos Pistoleros Latinos, Mexikanemi, MS-13, Texas Syndicate (US PERSON) y Los Bandidos, de acuerdo a la investigación.