El FBI podría estar manipulando estadísticas para aparentar que hay más casos de extremismo violento en EE.UU.
El FBI podría estar manipulando sus estadísticas para aumentar la cantidad de casos de ‘extremismo violento’ que se registra en EE.UU., según una carta enviada este miércoles al director de esta agencia federal de investigación, Christopher Wray, por el representante republicano estadounidense Jim Jordan.
«Los funcionarios del FBI están presionando a los agentes para que reclasifiquen los casos como ‘extremismo violento doméstico’ [DVE, por sus siglas en inglés], incluso si estos no cumplen con los criterios para tal clasificación», aseguró el político en su declaración.
Jordan basa sus afirmaciones en las denuncias de empleados de la propia agencia, quienes aseguran que han sido alentados e incentivados por sus superiores a incurrir en dicha práctica a través de premios y ascensos. El objetivo sería alcanzar las métricas de rendimiento fabricadas por el propio FBI.
Según el republicano, estas revelaciones «refuerzan las preocupaciones» con respecto a la «politización» de la agencia bajo el liderazgo de Wray. Además, cree que resultan «escandalosas» e indican que «puede ser engañosa» la narrativa impulsada por la Administración del presidente Joe Bien, cuando dice que el extremismo violento es la «mayor amenaza» a la que se enfrenta la nación.
De acuerdo con el FBI, la violencia extremista es cualquier acto delictivo violento en el interior de la nación norteamericana que busque justificar o apoyar objetivos políticos, ideológicos, religiosos, sociales o económicos. En junio de 2021, Wray declaró que su oficina tenía un programa de investigación «muy activo» para perseguir el extremismo violento y que había «duplicado la cantidad de investigaciones de terrorismo doméstico».