El FBI planea luchar contra el aumento de precios en EE.UU. llevando ante la Justicia a los «delincuentes que cobren más a sus clientes»

El Departamento de Justicia de EE.UU. ha comunicado sobre lanzamiento de un operativo que tiene como objetivo disuadir, detectar y enjuiciar a quienes se aprovechen de las interrupciones en la cadena de suministro para obtener «ganancias ilícitas».

A raíz de los persistentes aumentos de precios, que inicialmente se derivaron de las interrupciones en la cadena de suministro por la pandemia del covid-19, la División Antimonopolio de dicha cartera y el FBI han decidido «proteger a los consumidores estadounidenses de esquemas colusorios». «No permitiremos que las empresas confabulen para cobrar más de lo debido a los consumidores, con el pretexto» de esta crisis, señaló el fiscal general adjunto Jonathan Kanter.

«El problema persistente» de dichas interrupciones «ha creado una oportunidad para que los delincuentes fijen precios y cobren más a los clientes», socavando la recuperación económica del país, explicó por su parte el subdirector de la División de Investigación Criminal del FBI, Luis Quesada.

«Las economías de todo el mundo se han enfrentado a desafíos importantes causados ​​por las interrupciones en la cadena de suministro como resultado de la pandemia. Las restricciones de transporte, las interrupciones en las operaciones comerciales y la dificultad para obtener materias primas han llevado a mayores costos de producción y envío, lo que a su vez ha resultado en precios más altos para los consumidores. Las interrupciones en la cadena de suministro han tenido un amplio alcance y han afectado a diferentes sectores, desde la agricultura hasta la atención médica», reza el comunicado.

La inflación

Esta crisis de interrupciones ha afectado fuertemente a EE.UU., donde la inflación alcanzó niveles récord en enero, con un aumento del 7,5 % respecto al mismo mes del 2021, mientras la confianza del consumidor se desplomó a un mínimo de once años. Estos factores provocaron duras críticas contra el presidente Joe Biden y su Gobierno. Entretanto, desde la Casa Blanca culpan a la «codicia» de las empresas del incremento de los precios.

Además de las interrupciones en la cadena de suministro, otro de los factores que influyó en la inflación es el aumento de la demanda en medio de la recuperación de la economía tras el golpe de la pandemia. La situación también se agravó por las medidas que las autoridades estadounidenses adoptaron para apoyar a sus ciudadanos, inyectando enormes sumas de dinero en la economía.