El Comité Olímpico Ruso dirige una queja a la Federación Internacional de Gimnasia por el arbitraje en la final de la rítmica
El Comité Olímpico Ruso (COR) ha dirigido una solicitud formal a la Federación Internacional de Gimnasia en relación con el arbitraje en la final de la gimnasia rítmica individual, que tuvo lugar este sábado y generó polémica.
Los jueces otorgaron el oro a la israelí Linoy Ashram pese a que cometió un error flagrante al dejar caer la cinta durante su intervención, dándole un total de 107,800 puntos frente a los 107,650 de la rusa Dina Avérina, que confesó más tarde en comentarios a la televisión que le «duele» el resultado, y no porque se quedó como la segunda, sino por «un arbitraje injusto», al llevarse el oro «una chica que actuó con la pérdida».
«Me ofende más la injusticia. Siempre estoy a favor de un deporte limpio», declaró Avérina.
«Una vergüenza para la gimnasia rítmica»
Por su parte, Irina Víner-Usmánova, la entrenadora de las gimnastas rítmicas rusas, arremetió en una entrevista exclusiva con RT contra el arbitraje, el que calificó como «una flagrante injusticia».
«Dina no perdió, ganó. Pero, lamentablemente, el arbitraje fue una flagrante injusticia», recalcó la entrenadora, que explica que la deportista rusa «lo hizo todo limpiamente, no se equivocó en el último ejercicio«, mientras que la israelí «lamentablemente, cometió un error flagrante, por el cual todas las brigadas suelen quitar puntos por desempeño, técnica y arte».
«Siempre dicen que si hay este tipo de error, una persona nunca podrá —si la otra no cometió el mismo— convertirse en campeona, y mucho menos en campeona olímpica, y más aún en el último evento», subrayó Víner-Usmánova, para concluir que «fue simplemente una vergüenza para la gimnasia rítmica».
El ministro de Deportes de Rusia, Oleg Matytsin, afirmó que el arbitraje de la gimnasia rítmica de este sábado planteó «muchas preguntas». «No es casualidad que se hayan presentado tantas protestas contra los jueces de parte de atletas de diferentes países», señaló el alto funcionario, añadiendo que «para nosotros, Dina Avérina es la verdadera campeona» de estos JJ.OO., que «merecía ganar el oro».