El canciller húngaro explica por qué algunos países de la UE no actúan según sus intereses nacionales

Hungría es capaz de enfrentarse a las crisis globales y tendrá éxito porque los húngaros son «campeones mundiales en gestión de crisis económicas», señaló este sábado el ministro de Exteriores del país europeo, Peter Szijjarto, en el foro Tranzit que se celebra en la ciudad de Tihany.

El canciller constató que su país dispone de su propia política exterior basada en los intereses nacionales, «y no dictada por los centros de poder». También señaló que el mundo no se compone solo de América del Norte y Europa, y que «Hungría está en una buena posición y cada vez más personas están de acuerdo con el Gobierno húngaro». Según Szijjarto, en un entorno de recesión continental, Hungría puede ser una excepción local.

Hablando de seis peligros principales, entre los cuales mencionó la amenaza económica, la amenaza para el suministro de energía y la amenaza a la seguridad física por las acciones militares en un país vecino, el canciller también hizo referencia a «los chantajes políticos que enfrentamos constantemente cuando defendemos nuestros intereses nacionales».

Según Szijjarto, los períodos de peligros y crisis muestran la naturaleza real de los problemas. «La corriente principal [liberal]» que domina en Occidente quiere mantener la apariencia de que tiene razón, por lo que presiona a quienes dicen la verdad, afirmó el jefe de la diplomacia húngara. «Ahora vivimos en un período de la historia mundial en el que estos globos de comunicación están explotando. […] el velo cae, el rey está desnudo y la hipocresía se acabó».

Además, el canciller afirmó que Budapest no está dispuesto ni siquiera a discutir más sanciones a los recursos energéticos rusos, señalando que su país no es el único que mantiene esta postura, puesto que existe «un factor de estabilidad política y de valor político» que algunos «desgraciadamente no tienen».

El ministro describió cómo en la última reunión del Consejo de Asuntos Exteriores de la UE, en la que se trató el tema de las sanciones al petróleo procedente de Rusia, «varios colegas se acercaron y preguntaron: Peter, estás en contra, ¿verdad? Estamos con ustedes».

Szijjarto afirma que los que dicen la verdad están bajo la presión del ‘mainstream’ liberal, y si un país carece de un cierto nivel de estabilidad política y, en consecuencia, de valor político, no se atreven a actuar en su propio interés.