Altos cargos de Microsoft habrían ordenado en 2008 a Bill Gates que dejara de enviar correos electrónicos con insinuaciones inapropiadas a una empleada, según un informe publicado este lunes por The Wall Street Journal.

Gates supuestamente coqueteaba con la trabajadora y le hacía proposiciones como pedirle que se reunieran fuera del horario laboral, de acuerdo a los mensajes enviados en 2007, momento en el que el magnate ocupaba el puesto de presidente de la compañía y aún estaba casado. Un año más tarde, otros ejecutivos de Microsoft se enteraron de esto y se reunieron con Gates para discutir el asunto.

Reportan que la junta directiva de Microsoft investigó una antigua relación de Bill Gates con una empleada antes de su renuncia

En la reunión, el entonces abogado general, Brad Smith, y la directora de personal, Lisa Brummel, habrían advertido a Gates de que su conducta era «inapropiada» y le pidieron que se detuviera. A su vez, el multimillonario admitió que fue una mala idea y prometió dejar de hacerlo. Según los informes, la junta directiva del gigante tecnológico decidió no tomar más medidas porque no existió contacto físico entre los involucrados.

Por su parte, el portavoz de Gates, Bridgitt Arnold, tachó las afirmaciones de «falsos rumores, reciclados de fuentes que no tienen conocimiento directo y, en algunos casos, con importantes conflictos de intereses».

Así mismo, Frank Shaw, representante de Microsoft, subrayó que la empleada nunca presentó ninguna queja sobre el incidente. «Aunque [estos mensajes] eran de cortejo, no eran abiertamente sexuales, pero se consideraron inapropiados», explicó.

Estos hechos tuvieron lugar más de una década antes de que Microsoft iniciara una investigación en contra de Bill Gates por su antigua relación con otra empleada. Los directivos quisieron desplazar al cofundador de la compañía en 2020 antes de que él mismo decidiera abandonar la mesa directiva.

En agosto de 2021 Bill Gates y su esposa, Melinda, se divorciaron oficialmente tras 27 años de matrimonio. Cabe señalar que Melinda Gates había consultado con abogados dos años antes de solicitar el divorcio, argumentando que su matrimonio estaba «irremediablemente roto». A parte de este asunto personal, otra fuente de preocupación de su esposa fue los contactos de Gates con el fallecido delincuente sexual Jeffrey Epstein.