EE.UU. y Corea del Sur inician ejercicios navales tras la prueba de un misil balístico de Corea del Norte
Un portaaviones de Estados Unidos y su grupo de combate iniciaron el lunes ejercicios con buques de guerra de Corea del Sur frente a la costa este de la península de Corea en su primer entrenamiento de este tipo en cinco años, un día después de que Corea del Norte probara un misil balístico, informa AP.
Más de 20 buques de la Armada estadounidense y surcoreana, incluido el portaaviones de propulsión nuclear USS Ronald Reagan y destructores de ambos países, fueron movilizados para los simulacros en los que también se utilizarán aviones de combate y helicópteros.
Serían los primeros entrenamientos conjuntos de este tipo que involucran a un portaaviones de EE.UU. cerca de la península desde 2017, cuando la nación norteamericana envió tres portaaviones para realizar ejercicios navales con Corea del Sur en respuesta a las pruebas nucleares y de misiles norcoreanas.
Según la Armada surcoreana, los cuatro días de ejercicios tienen como objetivo demostrar la «poderosa determinación de los aliados para responder a las provocaciones» de Pionyang y mejorar su capacidad para realizar operaciones navales conjuntas.
Pruebas norcoreanas
Corea del Norte lanzó este sábado un misil balístico que voló unos 400 kilómetros a una altura máxima de 50 kilómetros y cayó en el mar de Japón. Se trata del primer lanzamiento de este tipo desde que Pionyang disparó un récord de ocho proyectiles en un solo día a principios de junio.
El país ha realizado un número récord de pruebas de misiles este año y recientemente se declaró una potencia nuclear, adoptando una nueva ley que autoriza el uso preventivo de armas nucleares en algunas situaciones.
Semanas atrás, Pionyang advirtió que los continuos simulacros militares conjuntos de las tropas estadounidenses y surcoreanas podrían provocar una segunda guerra de Corea.
«Nadie puede predecir cuándo los simulacros militares que se están llevando a cabo con todo tipo de pretextos podrían derivar en una segunda guerra de Corea«, declaró la Cancillería norcoreana en un comunicado.
